jueves, 30 de abril de 2015

El debate de los candidatos... o dos horas totalmente prescindibles

Hoy he estado con ocho ladrones: me han robado cada uno 15 minutos de mi vida que jamás recuperaré. Dos horas de plúmbeo, predecible, soso y descafeinado debate entre los ocho cabezas de lista al ayuntamiento de Lugo.
Nota al margen para Sonia Méndez: los 15 minutos salen de las dos horas que duró el debate, dividas entre los ocho ponentes: 60 minutos de cada hora multiplicados por dos horas son 120 minutos, y si divides 120 entre 8 te da 15. Bueno, quizás en la calculadora que usa la concejala serían 50 minutos cada candidato que sumarían 2:57 horas. Si no lo pillan es que no han estado atentos estos días.
Hasta Orozco estuvo aburrido, y eso que no es uno de sus defectos. Parecía uno de esos leones que ya están de vuelta de todo y que, tumbados, apenas se preocupan de mover el rabo para espantar a las moscas. Francamente creo que no se molestó en elevar el nivel visto el panorama, y posiblemente acertó. “Pa qué”, pensaría.

Público asistente al principio de la sesión
Los discursos predecibles, mecánicos, llenos de lugares comunes. El público entregado a sus respectivos candidatos, ya que la sala estaba llena pero por miembros de las diferentes listas, acólitos, y trabajadores de los diferentes partidos, lo cual no tiene nada de malo, pero le resta interés. También había chavales jóvenes, que se fueron al cabo de un rato, cuando se consiguieron despertar lo bastante como para andar.

Si les soy sincero hasta me cuesta trabajo explicarles de qué se habló, porque la cosa fue tan descafeinada… Una ponencia inicial (transparencia, gestión, “lo importante son las personas”, turismo, trabajo, empleo…) en la que se mencionaba a Lugo de forma genérica. Luego algunas preguntas sorprendentemente obvias como “¿qué opinan de las encuestas que se están publicando?” (Evidentemente los que les salen bien “son solo encuestas pero es una satisfacción”, y los que les salen mal “la verdadera encuesta es el 24 y los ciudadanos le darán la vuelta a la situación”). Bla bla bla…

Hasta respondieron al guión preestablecido los de la plataforma que pide los votos para Orozco… perdón, ha sido un lapsus, quiero decir los servicios para el HULA, que hicieron su pregunta de rigor para fastidiar a Castiñeira y, una vez logrado su minuto de gloria ("¡Hala, chúpate esa!" decían con la mirada), se marcharon sin esperar a que terminase el debate. Supongo que a preparar la factura por los servicios prestados.

Las únicas notas de color las pusieron algunos candidatos de agrupaciones con pocas posibilidades, que nos hicieron reír un rato. Desde el patetismo de alguno que le quedaba tan grande el debate como la chaqueta, hasta el que se nos puso a hablar de la importancia del sector pesquero. Sí, han leído bien. Se ve que en el Miño este año habrá temporada de atún.

La bisoñez de los nuevos candidatos les pasó factura, ya fuera por nervios o por falta de conocimiento de la ciudad. Incluso en ocasiones tiraron piedras contra su propio tejado hablando de que su primera medida al llegar al Ayuntamiento sería enterarse de cómo funciona (pues estamos listos...) o contando la anécdota de que un candidato de su partido, al que las encuestas no le daban representación, se pasó a otro y de repente le dieron en los sondeos 6 concejales (vamos, que el problema era el partido y no el candidato).

Habrán visto que he intentado no dar pistas ni nombres porque hasta me da cosa poner quién provocó cada bostezo. El nivel general fue tan tremendamente bajo que no merece la pena.

Público que resistía hacia el final...
Encima, por si esto fuera poco, de Lugo no habló nadie, fuera de los típicos mensajes genéricos de “mejoraremos el transporte”, “haremos un Lugo para las personas” o “acabaremos con la corrupción del ayuntamiento”. Propuestas: cero. Imaginen cómo sería el tema que yo pensaba preguntar por la opinión de los candidatos sobre mantener la estación de autobuses de Lugo en donde está ahora y no la hice porque me parecía fuera de lugar…

Eso sí, hablaron de la PAC, el precio de la leche, el paro, las competencias de la Xunta sobre saneamiento rural… todo muy importante para el votante medio de Lugo.

En cuanto a la dialéctica, dejando al margen los contenidos (como nadie dijo nada, todos bajo mínimos), muy bien Orozco y Portomeñe, bien Castiñeira y Olga Louzao, regular Rocha y Arrojo (ahora Arroxo), y bastante más flojo Agustín, aunque eclipsado por supuesto por Ildefonso Saavedra, quien por cierto afirmó que los grandes partidos son los únicos a los que benefician los medios de comunicación (¡¡¡mátame, camión!!!).

Por último decir que la gente que va apoyar a su candidato, que me parece muy bien, debería ser más educada. No es normal que se pasen todo el debate haciendo aspavientos y chistecitos básicos de los contrincantes en voz baja/alta, que es la que se pone para que parezca que comentas con el de al lado pero que realmente es para que te oigan los de alrededor, y “crear opinión” o que los jefes vean lo ingenioso que eres y lo bien que se te da ridiculizar al adversario o aplaudir al propio. Vamos como en el cumpleaños de mi sobrina. La de seis años, no la de nueve.

En resumen: entré con las dudas de a quién votar, y salí pensando a qué ciudad irme a vivir. Así de penoso fue el asunto.

miércoles, 29 de abril de 2015

Lo cerca que estuvimos de que Liñares fuera Alcalde de Lugo

Les voy a hacer una confesión: me lo estoy pasando de miedo con las municipales. Son las primeras elecciones en las que veo los toros desde la barrera, y tengo que decir que es mucho más divertido cuando, encima, te puedes permitir ser un poco gamberro y hacerte la foto con Rosa Díez y asistir a una conferencia del BNG.

Siempre he sido un poco “verso libre” y suelo decir lo que pienso. Desde luego, todo lo que digo es porque lo pienso así (sería un poco confuso decir que “pienso todo lo que digo” porque a veces si fuera más prudente me callaría).

Tras este pequeño trabalenguas les diré que otro capítulo para el cachondeo está siendo la reacción de los partidos políticos tras la encuesta publicada el domingo por La Voz de Galicia. Una vez más, por lo que se ve todos tienen razones para el optimismo, y vamos desde el “solamente es una encuesta” de los que no van a rascar nada, hasta el agradecimiento por ser elegido alcalde mayoritariamente de quien adelanta a Orozco por un 0,3%, siendo el margen de error el 0,5%, lo que hace que hablemos de un obvio empate los que no vivimos en fantasilandia.

Lugonovo se autoadjudica la “llave del gobierno”, dando por sentado que el BNG va a apoyar a Orozco y que Ciudadanos se aliará con el PP, siendo más obvio lo primero que lo segundo en mi modesta opinión.

Pero a lo que menos importancia veo que le está dando es a la valoración de los candidatos, cuando en mi opinión es de lo más revelador. Entre otras cosas porque la extrapolación de la intención de voto es un tema, ya que hablamos de futuribles, y otro muy diferente es la percepción que se tiene de los cabezas de lista, que es algo más “real” porque es una cuestión de ahora mismo, un hecho objetivo (es objetiva la existencia de esa percepción, no que ésta refleje la realidad).

En esa valoración se pone en cabeza el señor Orozco, cosa que no extraña a nadie porque a pesar de todos los pesares es una bestia política (en el buen sentido del término) y un tipo cercano que puedes detestar como alcalde pero que te apetece llevarte de cañas. Un 98,3% de conocimiento te deja descolocado porque lo único que puedes pensar es que el 1,7% de los encuestados dice no saber quién es su alcalde desde hace casi veinte años sólo por fastidiar. O eso o viven con Bob Esponja, en una piña debajo del Miño.

La segunda mejor nota es para Olga Louzao, cabeza de lista de Ciudadanos. Poco conocida, sí (un pírrico 16,9% pero que supera al primero de Lugonovo y al de UPyD, que lleva ahí ya unos años), pero muy apreciada por los que la hemos tratado (la primera persona es totalmente intencionada).

El otro extremo de la lista está formado por Agustín, candidato de UPyD, que tiene como losa difícil de levantar el ir detrás de Ildefonso Saavedra, que ya es triste.

Igual de doloroso para Jaime Castiñeira debe de ser figurar como tercero por la cola, a un deprimente 0,43 % de la nota de Saavedra. Es obvio que la postura en el tema del HULA y algunas cosas más le están pasando factura.

¿Que le doy mucha importancia a los candidatos? Mucha no, toda. Las municipales se basan principalmente en quién es la cabeza visible de la lista, intentar que los otros 24 no te quiten demasiados votos, y que el programa lo lean con generosidad. Todo lo demás son filigranas.

Es más, miren si es importante que creo que deberían ser ilegales las componendas entre partidos para negociar la continuidad o salida del líder por intereses espurios.

Para aclarar este concepto les voy a poner un ejemplo: si el BNG y Lugonovo ponen como condición la cabeza de Orozco para pactar, los lucenses se encontrarían con que no conocen a su alcalde, que sería probablemente Santín. “¿Y ese quién es?” dirá la mayoría… Pues precisamente ese es el problema.

Siguiendo con este bonito ejemplo les hago notar que el número tres de la lista de Orozco de 2007 era un tal Francisco Félix Fernández Liñares. Imaginen lo que habría pasado si el panorama de 2015 hubiera tenido lugar en 2007: Liñares habría sido alcalde.

Es preocupante pensar lo cerca que estuvimos de que Liñares fuera Alcalde de Lugo. Si el BNG hubiera pedido la dimisión de Orozco para pactar (lo que ya están diciendo ahora, tanto ellos como otros partidos) habríamos tenido al señor de los sobres como primer edil.

Para echarse a temblar.

martes, 28 de abril de 2015

Lugo tiene las tasas por terraza más caras de Galicia... sí, seguro

Quien tiene boca se equivoca, eso es un dicho habitual que refleja una situación real. A mí me ha pasado, a ustedes también, y a todo ser humano porque nuestra condición falible nos condena a no ser perfectos.

Sonia Méndez, concejala de economía del Ayuntamiento de Lugo, acusó ayer a Lugo Monumental, asociación que presido, de dar datos erróneos sobre las tasas de terrazas de Lugo para asegurar que son las más caras de Galicia. Curiosamente la propia Sonia Méndez comete un error de bulto, precisamente el mismo del que acusa a Lugo Monumental en este párrafo de su nota de prensa:

Como explicou Sonia Méndez, a información difundida por esta asociación é falsa porque comete o erro de comparar elementos que non son comparables. Por exemplo, parte dun erro fundamental como é o de tomar como referencia para a comparación o prezo por ocupación dun metro cadrado de solo na cidade de Lugo e o prezo por mesa no caso de Pontevedra o que lle leva a dicir que a taxa nesa cidade é inferior ó real.
Lo curioso es que el cálculo que hicimos tiene en cuenta ese hecho, y precisamente referencia que la mesa con cuatro sillas ocupa, según común acuerdo en muchas ordenanzas como la del ayuntamiento socialista de Vigo, tres metros cuadrados.

La que no ha tenido en cuenta ese hecho es, precisamente, la concejala, que asegura en el audio colgado con la nota que en Pontevedra la tasa es de “más de 108 euros por metro cadrado” cuando esto no es cierto. Ese coste es para la mesa con cuatro sillas, y no por metro. No deja de ser irónica la acusación de “non distinguir” cuando es la concejal la que comete dicho error.

Es verdad que cometimos un pequeño error en un detalle: no aplicamos unos coeficientes que se aplican según las zonas donde esté la terraza en Ferrol y Pontevedra (sale más caro en una zona de primera categoría que en una de quinta, como es lógico) pero aun corrigiendo ese fallo (que hay que reconocer) el dato final no varía: Lugo es la ciudad con las tasas más caras de Galicia para las terrazas.

¿Qué pasará ahora? ¿Reconocerá su error Sonia Méndez y pedirá disculpas públicamente por haber acusado a una asociación de mentir? Francamente espero que sí. Es una persona que no me cae mal y creo que es lo bastante noble como para reconocer un error. Sería lo suyo.

lunes, 27 de abril de 2015

Rosa Díez en Lugo

El sábado estuvo en Lugo Rosa Díez, para amadrinar la presentación de la lista y del programa de UPyD para las municipales. Como la visita la organizaba mi amiga Ana Argiz, me pidió que le echara una mano para ver cómo se podía aprovechar bien el tiempo y que la cabeza nacional de Unión Progreso y Democracia viera alguna cosilla de Lugo además de hacer las cosas a las que vino.

El programa de la visita fue sencillo pero efectivo: rueda de prensa en la sede de UPyD en la calle San Roque, subida a la Muralla por O Cantiño, foto de rigor en la Mosquera, bajada por la rampa que está frente a la Catedral, visita a la Domus del Mitreo, a la Catedral, paseo por la calle de los vinos a tomar unas tapitas, y a comer. Luego se tenía que ir a Bilbao.

En la rueda de prensa tuvieron un detalle de genialidad. En la mesa donde estaban los micrófonos se podía ver claramente una camiseta color magenta (el de UPyD) con un texto reivindicando los servicios para el HULA. Una jugada maestra en la que se equilibró con inteligencia la reclamación ciudadana pero sin hacerle el juego a la campaña que el PSOE tiene instalada en la calle de la Reina. Tras la rueda de prensa empezó el paseo.

Yo me uní a la comitiva en la Domus del Mitreo para presentarles al siempre insuficientemente valorado arqueólogo Celso Rodríguez, que está dispuesto a explicar las maravillas de ese solar a todo el que venga, sea un personaje famoso o un grupo de amigos como ya me ha demostrado en varias ocasiones. Un lujo.

Después me tuve que marchar, pero los demás siguieron a la Catedral, donde su fabriquero, César Carnero, les explicó lo principal de la seo lucense, incluyendo los frescos restaurados y la tan llamativa capilla de Nuestra Señora de los Ojos Grandes. Las aportaciones de Celso y César dieron una importante dimensión cultural a la visita.

Rosa con Celso en la entrada de la Domus del Mitreo
Nos encontramos nuevamente en los vinos, donde hicieron un alto para tomar un ribeiro y una tapa en el Verruga. Estuvimos mi madre Miluca y yo charlando un buen rato con Rosa y una de dos, o es una gran actriz o realmente estaba relajada y disfrutando de la visita porque nos estuvo hablando maravillas de la Domus y de la Catedral. También de algunos escaparates de la zona, como el de la joyería Honorino Freire, donde vio unas piezas de reproducciones que le llamaron mucho la atención.

Después se fueron a comer al Antas, en la Plaza del Campo, y como tuvieron la amabilidad de invitarme a tomar el café con ellos (bueno, Ana me dijo que fuera a comer pero no pude) me acerqué a tiempo de ver a Rosa Díez muy contenta con el torques que le habían regalado sus compañeros de Lugo, comprado en la joyería que casualmente había visto ella antes. Prometió llevarlo en una entrevista que le hacían el domingo en La Sexta pero no lo pude comprobar así que no sé si cumplió su primer compromiso de campaña en Lugo.

Antes de marcharse sacó la cartera y pagó su cubierto, algo que debería ser natural y no tendría que comentarse, pero que les cuento porque no es lo más corriente a esos niveles. Les diré que en las pulpadas y comidas a las que asistí cuando estaba en el PP cada uno se pagaba su cubierto, pero no sé si Rajoy o Feijoo también lo hacían. Esta vez lo vi yo mismo.

Puse una foto en Facebook y no faltó quien trajera a colación aquella desafortunada frase de “muy gallego en el peor de los sentidos”. Obviamente a mí tampoco me hizo especial gracia, pero creo que una frase suelta de hace cinco años y por la que se disculpó reiteradamente no es argumento suficiente para criticar a alguien, sobre todo en una ciudad en la que se sigue tratado de usted a Liñares y se le hacen reverencias allá donde va.

No soy votante de UPyD, aunque Ana hace campaña siempre que puede y hasta quizás me convenza en este mes que queda, pero si algo me transmitió Rosa Díez es la imagen de una persona fuerte y convencida. Está pasando por momentos bajos, como reconoció abiertamente, pero a veces la vida te pone a prueba para luego recompensarte. Y a veces para fastidiarte igualmente.

No le veo a UPyD un brillante futuro como partido, la verdad, pero nunca se sabe y quizás es meritorio reconocerles al menos que parece que han elegido la honra a los barcos y eso no es algo a menospreciar. La mayoría eligen los barcos.

viernes, 24 de abril de 2015

El artículo número 1.000

Hoy llegamos a los 1.000 artículos, que se dice pronto. Ha habido de todo, incluso imagino que habré incurrido en contradicciones porque nadie es perfecto y a veces evolucionas y cambias de idea en ciertos asuntos, pero creo haber sido siempre bastante coherente, lo que también tiene el riesgo de repetirse, de lo que soy consciente.

Al principio me costaba un poco encontrar un tema al día sobre el que hablar. Hoy me pasa lo contrario, se me amontona el chollo y muchas veces se me despistan cosas que no puedo tratar en su momento y luego pierden sentido o actualidad y se me hace raro recuperarlas.

Hace unos días hacía un homenaje a los amigos de Galicia Digital por haber publicado 300 artículos de este blog en su web. Hoy quiero hacer un nuevo reconocimiento pero un poco más genérico: a todos ustedes, los que pacientemente me leen.

Cuando escribes un blog te gusta que te sigan, obviamente, pero no pensé que la cosa fuera a ir tan bien. Estamos sobre las 150.000 visitas (contando las de Galicia Digital las superamos ampliamente, de hecho debe andar la cosa por las 175.000), que no es ninguna coña, y si hacen una sencilla división verán que es una media de 150 visitas diarias. Si tenemos en cuenta que los primeros artículos los veía muy poca gente, la curva es ascendente, y ahora está sobre las 250 o 300 visitas diarias por post, que es muchísimo más de lo que me habría imaginado jamás. Se lo agradezco de veras.

Desde que tengo el blog, bueno, ya de antes, desde que tengo teléfono con cámara, soy un maniático de fotografiar todo lo que me llama la atención (que es bastante, así tengo 235 Gb en más de 110.000 fotos, incluyendo las de las vacaciones claro) y lo hago porque pienso siempre en ustedes, en compartir esas cosas que se le vienen a uno a la cabeza cuando pasea por Lugo o por otras zonas, y ve las cosas que ve.

No les negaré que hay una importante dosis de narcisismo en tener un blog. Ya lo hemos comentado alguna vez. Pensar que tienes algo que contar, un punto de vista que dar, que puede ser valioso para alguien no deja de ser un ejercicio de autoreafirmación. Y haber alcanzado 150.000 visitas (insisto, contando las que reciben los artículos en Galicia Digital) ayuda a seguir, a sentir que alguien te escucha, incluso aunque no estén de acuerdo porque una de las cosas que me gustaría es que mis parrafadas ayuden a pensar incluso contra lo que yo argumento.

Empecé con el blog a los pocos meses de dejar el Ayuntamiento de Lugo, donde tuve la etapa laboral más emocionante y satisfactoria de mi vida de la mano de Joaquín García Díez. Esta bitácora me ayudó a superar una etapa complicada en que volvía a un trabajo bastante poco creativo después de dejar uno que me encantaba, y descubrí que me gustaba soltar ideas, algunas de las cuales me consta que se han aprovechado bien en ámbitos lucenses, y me alegro de ello, para eso las doy.

Alguna vez me han preguntado por la publicidad en “Historias desde Lugo”. Tenía alguna de Google, y no descarto volver a ponerla algún día, pero por ahora la he quitado porque no me ha generado ni un euro y la verdad, si escribo esto a diario es más como terapia que como intento de beneficiarme económicamente. Como mucho me gustaría poder llegar a un punto en que no me costara nada mantener el dominio, pero tampoco es importante porque es algo barato. Sólo mantengo un anuncio, el de Galicia Digital, por una mera cuestión de cortesía y de intentar, desde la modestia de esta página, promocionar a quienes dedican su actividad a la puesta en valor de nuestra tierra.

Hemos pasado muchas cosas juntos, ustedes mis fieles lectores y yo. Incluso hubo un momento en que tiré la toalla desanimado por ataques personales de quienes no saben lo que es la libertad de expresión, y usan un prisma peculiar en que sólo es válida si supone un aplauso constante hacia ellos. Gracias a ustedes, que me escribieron, me animaron y me apoyaron en un importante número, recuperé la ilusión de volver al tajo. Hasta cuando murió mi abuela Emilia, compartir aquellas cinco breves historias suyas con el ciberespacio me ayudó a superarlo, a seguir.

Esas cosas son las que me hacen escribir todos los días, y que me lean, que comenten, que critiquen mis posturas me gusta y ahí ha ayudado mucho Facebook, donde se suelen comentar más los temas que en los propios comentarios del blog.

Así que vamos a por los próximos 1.000 y, de corazón, muchas gracias a todos y anímense a comentar los artículos si les apetece. Sus opiniones son bienvenidas, incluso aunque no estemos de acuerdo. Quizás sobre todo si no estamos de acuerdo.

jueves, 23 de abril de 2015

El que esté libre de pecado...

La Unión Europea, esa insensible organización montada de arriba a abajo y en que la ciudadanía elige un Parlamento que recuerda a los de las monarquías absolutistas (porque está ahí de convidado de piedra), dice que hay que poner el ojo en los repartos de beneficencia, que hay mucha cara dura y que la gente que no lo necesita se mezcla con la que sí.

Sobre el asunto de la falta de corazón de nuestros líderes de Bruselas les recomiendo vivamente la lectura del artículo de esta semana de Joaquín García Díez, titulado “Sentir vergüenza”, que no tiene desperdicio.

Certificado de pobreza de 1931
Foto de www.todocolección.net
Pues a lo que íbamos, resulta que nuestros próceres exigen ahora un “certificado de pobreza”, aunque ahora ya no se llama como en los años 40 sino que es un “informe social de las necesidades de los beneficiarios”, que viene a ser lo mismo pero con un lenguaje más cargado de bombo, y políticamente correcto que satisface a los “miembros y miembras” de las altas instituciones. Nota al margen: como sigamos usando lo de “miembras” en plan coña vamos a conseguir que la RAE lo meta en el diccionario, como “cocreta”, así que ojito.

Lo triste del berenjenal que supone esa medida, que no es otra cosa que burocratizar la desgracia aún más, es que probablemente tenga sentido, porque hasta los servicios sociales y las asociaciones benéficas que se encargan del reparto de comida entre familias sin recursos asumen que hay un porcentaje, por pequeño que sea, de rostros de cemento armado que van con la bolsa a por arroz y aceite mientras tienen varios pisos alquilados en negro.

Caridad es una palabra que no gusta y no entiendo por qué. Puedo comprender que es una situación difícil y que debe ser un complejo trago tener que llegar a eso, a ir a buscar alimentos porque no puedes comprar ni siquiera pasta y tomate. Pero la caridad es un sentimiento positivo, que implica la ayuda desinteresada a quien lo está pasando mal, por mucho que hablemos de derechos que la administración no puede cubrir porque está muy ocupada inventando trámites.

Y no sólo hablamos de repartos de alimentos. Les voy a poner un ejemplo concreto. En Lugo la Policía Local estaba en la Plaza de la Constitución y ahora está en San Fiz, allá donde Cristo perdió el gorro. Pues bien, esto no tendría incidencia alguna si no fuera porque para dormir en el hogar del transeúnte, que está en la ronda de la Muralla (en el hogar de Santa María) hay que pedir un papel en la policía. ¿Se imaginan ustedes el panorama para una persona sin recursos, y quizás con problemas de movilidad, que tiene que ir hasta el quinto infierno a por un papel para volver otra vez a dormir al centro? Porque como comprenderán si duerme allí probablemente no tendrá coche en que ir a por el papel ni dinero para pagar el autobús.

Pues eso también es falta de caridad. No pensar en quienes tienen necesidades.

Últimamente nos basamos en verdades que escuchamos en series de televisión, pensadas por guionistas, y nos las tomamos en serio. Pero es que en ocasiones reflejan la realidad. No me saco de la cabeza una de House en que decía que “hay un imperativo evolutivo por el que nos importa nuestra familia y amigos, y hay un imperativo evolutivo por el que no nos importa una mierda nadie más. Si amáramos a la gente indiscriminadamente no podríamos funcionar". Es una frase cínica, cargada de autocomplacencia y de egoísmo… pero que contiene suficiente verdad como para que la descartemos como una ocurrencia.

¿De verdad estamos concienciados? ¿De verdad nos importan los cientos de muertos del Mediterráneo? ¿Tanto como para empeorar nuestra vida un ápice y hacer algo, además de meter una moneda de las pequeñas en la hucha de turno? ¿Compartir en Facebook la noticia y rasgarnos las vestiduras es suficiente? ¿O simplemente es una tirita para nuestra adormecida conciencia?

Acumulamos en nuestras casas ropa que no usamos “por si se pone de moda otra vez”, y cuando la llevamos a Cáritas en vez de al contenedor nos damos por satisfechos, cuando no es más que una forma de deshacernos de lo que no queremos.

El mérito está en compartir lo que sí queremos. No seré yo el que se erija como santo varón, soy el primero en reconocer que no hago ni una fracción de lo que podría… pero si les soy sincero no sé ni por dónde empezar, lo cual no deja de ser otra excusa.

El que esté libre de pecado...

miércoles, 22 de abril de 2015

Ya ondean las banderolas de campaña

El lunes terminó el plazo de presentación de candidaturas para las municipales y, casualidades de la vida, fue el día elegido para empezar la campaña “roja” de camisetas y cartelones para hablar del HULA y los servicios prometidos y no instalados, o puestos en horario inadecuado a juicio de una parte, creo que importante, de la población entre la que me incluyo.

Montando la carpa para recibir a Pedro...
Tengo entendido que hoy vendrá a Lugo Pedro Sánchez a hacer campaña y les apuesto el blog a que si es cierto irá al chiringuito que han montado frente a Hacienda a hacerse la foto con la camiseta de marras, lo que le asegurará la portada de los periódicos con la reivindicación pegada al pecho. Otra de esas casualidades que pasan es que los colores de la camiseta son los del PSOE, con lo que se sentirá cómodo con los tonos. Casualidades a tutiplén (palabra aceptada por la Real Academia, pásmense).

Que lo del HULA iba a ser usado en la campaña electoral era obvio, pero si les soy sincero pensé que serían algo más sutiles. Se ve que no estamos para perder el tiempo y los preliminares se dejan para mejor ocasión, así que vamos al grano, no sea que alguien se pierda en los matices y donde hay rojo vea naranja, morado o azul y equivoque la papeleta.

El tema de la reivindicación del HULA dejó de ser ciudadana y pasó a ser una herramienta política desde que se hicieron con el control del tema los habituales de la subvención, que adornan pechos con letras honoríficas o con títulos anuales relacionados más con la contraprestación del abono anual que otra cosa.

Por supuesto el fin último de todo esto no es conseguir los servicios, sino los votos. Nadie se equivoque.

¿A esta distancia a qué partido
les parece que pertenece la banderola?
Foto: El Progreso
¿En qué me baso para hacer tal acusación? Si lo tengo que explicar mal vamos, pero por si les quedan dudas expondré mi opinión. Supongamos que ustedes, personas de bien, quieren, como también quiero yo, que nuestro hospital tenga hemodinámica 24 horas, radioterapia y medicina nuclear. Tras montar toda la protesta, ¿cómo reaccionarían ante el anuncio de la Xunta de la licitación de los equipos? Entiendo que con alegría, pero hete aquí que no fue lo que pasó, sino que se acusó a la administración de electoralismo

Esta imputación sería creíble de no venir de quienes aplaudieron que “los otros” hicieran la llamada “ruta del cáncer” cuando convenía a sus intereses electorales; los mismos que aplaudieron que, tras años de reivindicación, se espere a escasas semanas de la campaña para proponer el pago por parte de la Diputación de las 24 horas de hemodinámica; los mismos que no vacilan en posar para la foto con un partido que cogobernó en la Xunta sin que en aquel momento se considerase importante salvar a los infartados…

Miren, esto es un puñetero circo. Somos muchos los que apoyamos públicamente este asunto desde el principio (¡y los que están saliendo de debajo de las piedras ahora que viene la campaña!) pero también los que nos negamos a un uso tan burdo del mismo para arañar votos.

Aún les diría más. Si siguen por ese camino tan obvio, tan poco elaborado, de hacer una campaña descarada hacia unas siglas, con manifestación a 72 horas de las elecciones incluida, quizás esto se les vuelva en contra, que ya estamos un poco hartos de que nos tomen por idiotas.

¿Que el asunto del HULA nos ha distanciado a algunos del PP? Por supuesto. Pero no se crean, señores de las pancartas rojas, que ha sido su gran habilidad la que nos inclina lejos de ese partido, sino la propia torpeza mostrada por éste en el tema del HULA. Así que si alguien merece la medalla de una posible, incluso probable, victoria de Orozco por enésima vez no son ustedes, aunque no dudo que intentarán pasar la factura a ver si cuela. Y colará.

martes, 21 de abril de 2015

Predicciones municipales o cómo creo que va a quedar la cosa a un mes y pico

He cumplido mi palabra y he esperado a que se publicaran las listas de candidatos de todos los partidos, por aquello de si había sorpresas o novedades que pudieran hacer cambiar las cosas. No ha sido así, y tras el parto de los montes, que en algún caso dio lugar al clásico ratón, me he molestado en mirar los resultados electorales de las elecciones en Lugo de la democracia y basándome en eso y en los pálpitos que me dan por lo que veo por ahí el resultado de las municipales creo que, a día de hoy, será algo como lo siguiente:

PSOE 10
PP 10
Lugonovo 2
Ciudadanos 2
BNG 1

Observarán que el orden ha cambiado y que pongo al PSOE por delante del PP aunque con empate a concejales, y sin la gran caída que se asume mucha gente que habrá para ambos partidos. ¿Los motivos de ese mantenimiento en votos? No es tal, sino que es un mantenimiento de porcentajes que no es lo mismo. Paso a explicarles cómo veo yo el asunto.

Para empezar preveo una ligera caída de la participación. Habrá gente que es “de partido” o que está convencida de unas siglas pero a las que algún candidato no le tire tanto, por lo que se quedará en casa. Bajar unos dos o tres mil votantes no es ninguna tontería e influye muchísimo en el reparto de concejalías.

Por otro lado, hay que tener en cuenta que al haber ocho candidaturas, que son una barbaridad, los votos “cabreados” se van a repartir, con lo que el efecto resultante es menos acusado que si se concentraran en una lista alternativa por “cabreo”. Quiero decir con esto que si la gente que está enfadada con el PP sólo tuviera una opción a la que votar (por poner un ejemplo obvio, Ciudadanos) podría hacer que éstos dieran el salto, pero al existir UPyD o Foro Lugo Independiente (la única lista que me ha sorprendido porque no contaba con que llegara ni a formarse) se reparte el voto y se diluye el efecto.

Lo mismo pasa por la izquierda y el nacionalismo. Orozco compite con Izquierda Unida (en su marca ACE como los zumos) que a su vez tiene competencia de Lugonovo, que también pesca del caladero del BNG. La diferencia entre el PSOE y el PP va a ser mínima, quizás de unos 1.000 o 1.500 votos, mientras que el destino de sus “fugas” será de lo más variopinto.

La ensalada de siglas puede dar como resultado que todo se mueva para quedar similar. Y en estos casos Orozco ha demostrado ya que sabe moverse a pesar de los pesares.

Si esto es así, partidos que van a quedar como fuerzas residuales, sin entrar al “reparto” de concejales (en concreto I.U., Foro Lugo y UPyD) se pueden llevar tranquilamente otros 2.000 votos entre las tres, que se van a la nada.

En cuanto al “gran empuje” de Lugonovo, quedó en agua de borrajas y con una candidatura bastante descafeinada y unos apoyos poco convencidos, quizás puedan arrancar un par de concejales a costa de sangrar votos a la izquierda y el nacionalismo, apoyados sobre todo en la baza de Podemos, que está en caída pero tampoco tan acusada como debería. Un par de concejales como mucho y ya veremos para las próximas si lo hacen bien.

Ciudadanos puede sacar dos concejales también, si lo hacen razonablemente bien y Albert Rivera no mete la pata en el próximo mes y algo. Lugo funciona mucho por el Telediario, y si el programa electoral es mínimamente decente (cosa que confío tras hablar con Olga Louzao largo y tendido) pueden sacar votos del discurso nacional, aunque es una baza en la que yo confío poco.

Por último nos quedaría el BNG, que se vería reducido a una presencia unipersonal en el Ayuntamiento. Su tradicional política de apoyo a Orozco, contradictoria con su discurso contra el alcalde, le va a pasar factura pero no tanto como podría ser, ya que cuenta con una importante base fiel.

Con estos números, Orozco sería alcalde otra vez, en mayoría simple y sin apoyos.

Ya veremos qué pasa…

NOTA: Como las otras dos veces en que hice estas "predicciones", aclaro dos puntos. El primero es que no es una encuesta sino mi opinión de cómo creo que va a quedar la cosa. El segundo es que la situación es muy cambiante, y que la campaña promete ser divertida, y de ahí las grandes variaciones que me parece percibir en el ambiente... Pero oigan, el 25 de mayo les puedo dar los resultados exactos ;) Como todos...

lunes, 20 de abril de 2015

¿Qué va a pasar con el C.D. Lugo?

El otro día se debatía agriamente en un foro el tema del C.D. Lugo, cuyo consejo de administración por lo visto dimitirá en esta semana al completo, o casi al completo (me parece entender que los cargos políticos se quedan). El motivo, aparentemente, es la nueva propiedad del club que ha pasado en un 49% a manos de Tino Saqués, y quizás el requerimiento que éste envió al club el 20 de febrero en que reclamaba una convocatoria de junta general extraordinaria de accionistas.

Les confieso que este tema se me escapa bastante, y que lo único que considero obvio es que hay intereses bastante menos transparentes de lo que se ve en las noticias. A ver si nos aclaramos.

El C.D. Lugo, que iba bien, se ve obligado a pasar a ser una sociedad anónima deportiva por una norma en la que no vamos a entrar, aunque nos ha hecho la puñeta a todos porque ha sido la que empezó todo este rollo, si bien es cierto que el Breogán pasó por lo mismo y ahí lo tienen, tan rufo.

Hacían falta unos milloncejos de euros y aquí es donde empieza este calvario. Primero se pide a los lucenses que pongan el dinero, llamamiento de escaso éxito porque se limitaba mucho la compra de acciones con el pretexto de que hubiera “para todos” (ojalá ese fuera el problema) y que se intentaba evitar que una o dos personas controlasen el club. Bonito objetivo si no fuera porque al final les ha salido al revés.

Algunos, que somos ajenos al mundo del fútbol y tenemos poco que decir sobre ese tema, compramos acciones en un intento de ayudar a la marca Lugo y a defender a un club que, hasta para los no forofos, viene bien y es positivo para la ciudad.

Como aun así no se juntaba el dinero ni de broma, y faltaban todavía un millón y medio de euros, entran el Ayuntamiento y la Diputación, en una acción compleja de entender, a apechugar ese dinero en conjunto con el compromiso de que se buscaría un accionista privado que comprara sus acciones, lo que por otra parte anularía la intención inicial de que no lo controlase una única persona… si es que esa intención era real, que visto lo visto uno ya lo duda.

Entonces aparece el salvador, un empresario de origen lucense pero que está afincado en Luxemburgo llamado Gerard López. Se realiza una adjudicación por parte de la Diputación (que, por cierto, también se encargó de enajenar las acciones del Ayuntamiento, cosa llamativa), y el único que concurre al proceso es Gerard López. Pero resulta que en su solicitud puso que la forma de pago sería aplazado, cosa que no contemplaban las bases, así que queda desierta la adjudicación. Hay que repetirla.

Gerard López. Foto: La Voz de Galicia
Se comienza nuevamente el proceso y se publican las nuevas bases, en que se incluye la fórmula de pago planteada por el empresario… y a última hora (literalmente) Tino Saqués hace una propuesta en que mejora la oferta económica de López y se hace con el concurso. Aquí es cuando se lía parda.

El concurso tiene dos fases en que se valora la propuesta económica y la deportiva. La nota de Saqués en la parte deportiva es muy inferior a la de López, pero estamos un sistema capitalista y la Diputación valoró más la pasta, así que los 1,6 millones de euros propuestos por Saqués superan a los 1,5 de López y se lleva el gato al agua.

A partir de ese momento las cosas se precipitan: la directiva del Lugo muestra sus disgusto porque por lo que se ve los desencuentros con Tino Saqués eran habituales, e impugnan el concurso (curioso, porque la primera vez les pareció maravilloso) reconociendo incluso que si hubiera ganado López no lo habrían impugnado, que ya es decir.

Tino Saqués Foto: El Progreso
Personalmente, como lucense y como modesto accionista, les diré que a mí me preocupa muy poco que el máximo accionista sea Saqués o López pero sí me intranquiliza un poco más que sea una única persona el que tenga el 49% de las acciones del club de mi ciudad. Se supone que el Lugo es un bien común de los lucenses, si bien hay que reconocer también que el escaso interés colectivo que se demostró cuando se pusieron a la venta las acciones es lo que originó este caos.

Tengo un recorte en casa de una entrevista que le hicieron a mi abuelo Cándido en un partido del Lugo en que se ofrecía a poner 5.000 pesetas de las de aquella para comenzar una suscripción popular para poner luces en el estadio. Hoy eso no creo que funcionara porque todos somos “aficionados” de boquilla pero no de cartera.

Tino Saqués aprovechó la ocasión, porque es un tipo espabilado, y logró adjudicarse el concurso porque su competidor enseñó sus cartas con la confianza de que sería el único que quería comprar ese 49%. Se equivocó y Saqués aprovechó la ocasión, lo cual es lícito. Además, que el propietario viva en Lugo es un punto a favor, qué quieren que les diga.

No defiendo a Saqués ni ataco a López porque ni conozco a ninguno de los dos ni tengo referencia alguna, pero tampoco veo clara esa animadversión contra alguien que lo que ha hecho es poner su dinero sobre la mesa para salvar al C.D. Lugo. Si Gerard López era un salvador, Tino Saqués también lo es, digo yo. Lo que pase a partir de ahora lo veremos, pero si les soy sincero es preocupante que las cosas se tuerzan cuando al equipo le iba tan bien.

Esperemos que esto sea solamente un bache y que pronto las aguas vuelvan a su cauce.

viernes, 17 de abril de 2015

Cinco pasos a dar para suprimir la ORA en Lugo

Quiere el destino que a los pocos días de venir el Alcalde de Pontevedra, el nacionalista Miguel Anxo Fernández Lores, a hablarnos del exitoso modelo de ciudad que propone y que ha llevado a cabo (que de teorías estamos todos un poco cansados), vuelva a ponerse de actualidad el tema de la ORA en Lugo.

Buses y ORA, muy relacionados. Foto de La Voz de Galicia
Jaime Castiñeira ha puesto el tema sobre el tapete, asegurando que si es elegido alcalde en seis meses liquidará el sistema. Por supuesto ya han salido a criticarlo y a decir que no es realista, que la ORA es necesaria y que sin ella el centro está condenado. No estoy de acuerdo.

La ORA no es necesaria, y para ejemplo tenemos el que les dije al comienzo: Pontevedra. El sistema de rotación de vehículos, que comparto que es necesario para la actividad comercial y para que no estén los mismos coches mangados todo el día en el mismo sitio, en la ciudad de la Peregrina lo han solucionado peatonalizando todo el casco histórico y poniendo recorridos en los que hay múltiples plazas de aparcamiento pero limitadas a 15 minutos de estancia.

Esas plazas son libres de uso por cualquier ciudadano, no es sólo para vehículos de transporte, siempre que cumpla esa limitación temporal. Con esto, si quieres ir a buscar algo pesado vas en coche y si es para hacer un recado breve vas andando que es sano.

Lugo no es Pontevedra, eso es obvio. Incluso en aquella ciudad no tienen servicio de autobuses urbanos, ya que la configuración de la ciudad es diferente, más compacta, mientras que Lugo es más lineal. Sin embargo creo que las desventajas de la estructura lucense se pueden compensar fácilmente con nuestra flota de autobuses, y, en esencia, imitar el modelo pontevedrés.

Para ello la propuesta habría que concretarla en los siguientes puntos concretos:
  1. Peatonalización de lo poco que queda por peatonalizar del casco histórico. En concreto hablo de las calles Montevideo, Bolaño Rivadeneira, Amor Meilán, Plaza del Ferrol, San Fernando, Quiroga Ballesteros y Santo Domingo. Sólo se permitiría el acceso a garajes, labores de carga y descarga y aparcamientos subterráneos.
  2. Crear bolsas de aparcamiento alternativo, que en parte ya existen pero que habría que retocar, como la zona del Parque de Rosalía, donde sería bueno optimizar las plazas de aparcamiento, Ramón Ferreiro, y sobre todo en el Carmen, la única zona que está pendiente de urbanización próxima al casco histórico y la esperanza que queda para la ubicación de un gran aparcamiento gratuito a una distancia prudente del centro.
  3. Mejorar la frecuencia y recorridos de los autobuses urbanos. Hay que abandonar las líneas que pasan “cada hora” y crear un sistema más dinámico, con autobuses que cada quince minutos hagan un recorrido básico desde la Medusa hasta la Fuente del Rey, aunque luego según las líneas haya variaciones sobre el mismo tema y, por supuesto, otros recorridos adicionales. El objetivo sería que cada muy poco tiempo tengas un autobús que te lleve a donde vas o a las inmediaciones, y que no tengas que esperar tres cuartos de hora en una parada para, de repente, ver aparecer a cuatro autobuses juntos que van en trenecito casi todo el recorrido.
  4. Crear plazas de carga y descarga en el centro limitadas a 15 minutos y de uso libre. Esto garantizaría la rotación de vehículos y que quien quiera hacer un recado con bultos pesados pueda hacerlo.
  5. Hacer campañas de concienciación, midiendo tiempos y haciendo ver que muchas veces acabas antes andando que en el coche. El sistema del Metrominuto de Pontevedra del que les hablé el martes, me parece de lo más ingenioso y efectivo.
Por supuesto a esto hay que añadir las cuestiones específicas de transportistas, personas con discapacidad, vecinos, empresarios de las zonas peatonales… pero como siempre está todo inventado y sólo hay que fijarse en lo que hacen los demás.

Quique Rozas y la ORA. Foto de El Mundo
Desde luego si se hace todo esto claro que es posible eliminar la ORA en Lugo. Jaime lo propone consciente de que lo puede hacer. Sabe también, porque lo ha denunciado en innumerables ocasiones el concejal Quique Rozas, que es uno de los principales núcleos de problemas en Lugo y que, encima, la concesión huele raro al estar en manos de la famosa empresa Véndez.

Y miren, la cuestión es probar porque a cambiar y volver a poner ORA siempre estamos a tiempo.

jueves, 16 de abril de 2015

El tiro por la coleta

De gracietas políticas estamos todos bastante cansados, y ya se suele decir que más vale caer en gracia que ser gracioso… y si no consigues ni esto último eres, mal vamos.

El señor Pablo Iglesias ha querido hacerse el simpático en su primer encuentro con el Rey y no ha tenido otra ocurrencia que llevarle en DVD la serie “Juego de Tronos”, así, de guay, y le ha salido el tiro por la coleta. ¿La intención? Probablemente descolocar al Rey y conseguir la foto de rigor, que debe tener mono de abrir los telediarios. Consiguió lo segundo pero se quedó muy lejos de lo primero.

La reacción de Felipe VI ha sido la más natural del mundo: mirarlo con la altura que le da su genética (obsérvese el ingenioso juego de palabras), reírse y decirle que muchas gracias, que no la ha visto y que no la tenía. Fue sin duda la mejor forma de desarmar la chorrada ésta en la que el “águila” de Podemos, encima, mostraba un obvio sonrojo, que esa es otra.

Ponerse nervioso es una vulgaridad, como escribió el gran Alfonso Ussía en sus - medio serios medio en coña - tratados de las buenas maneras, que les recomiendo muy vivamente si quieren pasar un buen rato frente a un libro (bueno, tres).

Cuando alguien se pone nervioso al conocer a un famoso demuestra que está pensando que la otra persona es “más” que uno. Dar la mano al Rey no es más que apretarle, moderadamente según mandan los cánones, cinco dedos y una palma a un señor que, por lo que sea, porta la representatividad del Estado, pero que a fin de cuentas trabaja para nosotros. Sonrojarse como una colegiala es muy poco republicano, la verdad.

Otra cosa sería si te presentan a un ídolo al que admiras, o al señor/señora cañón que te pone tontorrón/tontorrona en cuanto aparece en pantalla, por poner un ejemplo. Ahí los nervios ya vienen generados por la expectación, pero entiendo que, siguiendo su discurso, la admiración de Pablo Iglesias por el Rey debiera ser bastante escasa, pero se ve que no tanto. Sus hechos desmienten sus palabras: vamos, que se le nota que le ha hecho “ilu”.

En cualquier caso, como decíamos, la tontada es un intento desesperado por volver a abrir los telediarios, porque si algo altera a Iglesias (más aún que conocer al Rey) es que el partido de moda ya no sea Podemos, que se ha quedado antiguo a la velocidad del rayo, sino Ciudadanos con Albert Rivera al frente, que le está robando "su" protagonismo.

Lo de ayer fue una falta de respeto para quien sea monárquico o quien vea en Felipe VI un rey digno y acertado. Una chorrada de consumo propio para “su” gente (la de Podemos) que por mucho que inflen números no llegan ni de coña para gobernar. Un guiño a la payasada, en el peor sentido del término, y a esos tiempos en que lo rebelde era tirar una tarta a la cara del poderoso, sólo que aquí han faltado nata y huevos para hacer algo así.

Todo esto aleja mucho al señor Iglesias de la imagen de un Presidente de Gobierno, cargo para el que nadie en su sano juicio lo propondría. Incluso sus votante, estoy convencido, ni piensan ni desean que este señor llegue a la Moncloa, más bien les gustaría que fuera el tocapelotas del Congreso, que eso sí se le daría de fábula. Pero nada más. Nadie le confiaría las llaves del reino porque la puede liar parda y lo sabemos todos.

Sus quince minutos de gloria han pasado. Seguirá como un zombi como tantos hay dando su espectáculo, pero ahora ha de dejar el hueco al siguiente, que a lo mejor resulta que lo hace mejor y consigue prorrogar ese tiempo creando una alternativa seria.

Gracias por jugar, y aquí tiene una foto-recuerdo de su "acción de rebeldía".

Por lo menos podía haberle regalado Star Trek, que es más educativo.

miércoles, 15 de abril de 2015

El fin de las obras faraónicas

Un mes y pico para las elecciones y el tema de propuestas, a día de hoy, sigue a remolque de lo que va contando Jaime Castiñeira. El resto por ahora no ha dicho esta boca es mía, y siguen dando giros entorno a su epicentro umbilical, que es mucho más interesante para ellos que para el resto de la ciudadanía.

Antigua potabilizadora: Foto de El Progreso
Como mucho nos van dando alguna perla suelta para contestar a las propuestas de Jaime. Concretamente a la que se hizo esta semana de convertir la antigua potabilizadora en un centro deportivo con rocódromo y demás, una idea que parece apropiada para el entorno, Orozco responde que su opción es hacer un museo (otro) relacionado con el agua o un centro de interpretación del agua. A este paso nos van a convertir Lugo en una ciudad-museo, sin actividades pero llena de salas vacías, costosas y, eso sí, donde hacer preciosas fotos de esas tan modernas.

Parece que Orozo no cae de la burra y no acaba de entender que antes de ponerse a hacer museos como un loco en donde Cristo perdió el gorro lo suyo es poner a andar la ciudad, y hacer cosas más prácticas como, por poner los dos primeros ejemplos que se me ocurren, adecentar lo que se ve desde la Muralla o utilizar las ruinas que tenemos adornando la plaza del Ferrol.

Otro museo, que además hace doblete, porque no sólo proponen eso en la antigua potabilizadora sino que ya habían gastado una millonada en restaurar o hacer obras en la fábrica de la luz que sigue igual de abandonada que antes sin que haya mediado mayor explicación, y su destino era el mismo: un museo sobre el agua. Será para recordar cuando estaba limpia y te podías meter en el Miño sin arriesgarte a brillar por las noches.

Es decir, que frente a una propuesta que apuesta por el dinamismo, el deporte y aprovechar una instalación a la que andando sólo van a ir los que hagan ejercicio y en coche los que estén un poco despistados, se contrapone una instalación tipo MIHL, que se ven negros para llenar con algo y que no esté tan vacío todos los días. Podría funcionar si, por ejemplo, el catamarán llegara a ese supuesto museo, pero no va a ser posible porque suele dar la vuelta antes del molino que hay antes de la potabilizadora. Y aun así tendría una breve visita diaria o dos, sin más. No lo veo.

La época de las obras faraónicas ha terminado, aunque alguno no parece haberse enterado. Ahora la gente quiere cosas razonables, útiles, y a poder ser que no cuesten una millonada. Lo del centro deportivo no suena nada mal, que además está en una zona muy bonita.

martes, 14 de abril de 2015

Aprender más sobre peatonalización en una tarde muy aprovechada

Hoy (ayer cuando me lean) fue un día realmente completo. No paré en toda la tarde y hay temas que voy a dejar para más adelante pero me voy a centrar ahora en dos cosas.

La primera es felicitar a Olga Louzao, portavoz de Ciudadanos en Lugo, por su más que apreciable espíritu constructivo para recibir las críticas. Quienes me leyeran ayer sabrán que me llevé una pobre impresión la semana pasada en el Café Ciudadano organizado por esta agrupación, y la reacción de Olga no fue otra que coger el teléfono y llamarme para tomar otro café, aunque esta vez los dos solos, y recibir “de tú a tú” esas críticas, ya más detalladas.

Eso lo hace muy poca gente, y hay que decir que lamentablemente menos aún en el mundo de la política, donde solo otra persona que yo conozca directamente, Joaquín García Díez, no solo valora sino que busca la crítica constructiva, porque entiende que para dar incienso ya hay suficiente personal.

Olga me matizó el tema del programa electoral así que les voy a dar una prórroga en mi voto de confianza. La razón de no presentarlo por ahora es que les preocupa que les copien, si bien creo que es una estrategia peligrosa, porque habrá muchas coincidencias en programas electorales y el primero que lo presente será el más “original”, mientras que el resto van a parecer burdas copias. Pero bueno, cada uno decide su camino.

No le voy a dar muchas más vueltas a ese café, aunque de verdad que me resultó muy interesante y me convenció de que Ciudadanos ha acertado plenamente con su cabeza de lista en Lugo.

Otra de las citas de la tarde fue la charla que Miguel Anxo Fernández Lores, alcalde de Pontevedra, vino a dar invitado por su correligionario Rubén Arrojo (ahora Arroxo). Una impresionante exposición en la que explicó cómo hizo el cambio de Pontevedra de lo que era a lo que es, una ciudad agradable, peatonal, ciudadana y caminable.

Con un estilo cercano y sincero, Fernández Lores parecía sentirse cómodo y no se anduvo por las ramas. Explicó el valor que hizo falta para sacar un decreto que de un plumazo peatonalizó todo el casco histórico, que paulatinamente se fue modificando físicamente. En Lugo pasó lo mismo de la mano de Joaquín (es la segunda mención en el mismo artículo, lo sé, pero ha coincidido así, qué quieren que les diga), que también sacó una norma por la que de golpe y porrazo los coches dejaron de poder pasar por donde llevaban décadas poniendo en peligro a la ciudadanía.

Es cierto que Pontevedra fue más allá, porque tiene un casco histórico más grande, y encima redujeron la velocidad de toda la ciudad a 30 km/h. Francamente, eso es algo que en Lugo podría ser complicado de asumir al principio pero que creo que es necesario, y como bien explicó el regidor pontevedrés, la diferencia de tiempos es ridícula porque al bajar la velocidad de circulación se pudieron eliminar semáforos y cruces sustituyéndolos por otras opciones como rotondas y cedas.

Quizás les resulte más atractivo el modelo si les digo que en Pontevedra no existe zona ORA. Todos los aparcamientos de superficie son gratuitos. Todos sin excepción. Los único que se pagan son los soterrados.

Tampoco hay carril bici, porque toda la zona peatonal es carril bici, tal y como ocurre ahora en Lugo a pesar de la resistencia de algunos. Pintar unas líneas de verde en el suelo no es la solución para el desplazamiento sobre dos ruedas, sino la concienciación de que la jerarquía es peatón / bicicleta / transporte público / vehículo privado. Entender eso es básico para comprender el exitoso modelo de ciudad de Pontevedra.

Otras medidas como el metrominuto pueden parecer tontas pero son muy útiles para concienciar. Se trata de un mapa, al estilo de los del metro, en que se señalizan las distancias de una plaza a otra, o de un punto a otro, haciendo recorridos como si se tratara del subterráneo… pero con la peculiaridad de que son distancias a pie. Son la demostración práctica de que en ciudades como Pontevedra (o Lugo) las distancias son cortas y que no merece la pena sacar el coche del garaje para ir y volver a un recado que está a 10 o 15 minutos andando.

Muchas ideas, muy buenas, y que han demostrado que las ciudades sí pueden ser un espacio para los seres humanos, para que los niños vayan solos al colegio sin preocuparse de si los van a atropellar, para que la gente mayor pasee con tranquilidad…

Sé que a mi amiga María de Pontevedra no le hace ninguna gracia que le llenemos aquello de turistas, pero no puedo menos que invitarles a acudir a esa ciudad y ver un modelo a imitar, adaptado a Lugo.

La charla de ayer me hizo pensar que Lugo podría ser como Pontevedra si hubiéramos sabido conservar al Alcalde que tenía esa visión, y ya puestos lo nombro por tercera vez en un artículo: Joaquín García Díez fue la persona que entendió que el futuro es este modelo, pero no supimos conservarlo por las razones que fueran. Una pena. Ahora vemos con envidia cómo otras ciudades disfrutan de lo que pudimos ser y no somos.

He de decir, por último, que percibí ciertas caras de extrañeza porque yo acudiera a un acto del BNG. Pues no me arrepiento. Fue constructivo y educativo, mucho más que otras charlas a las que he acudido sin siglas de por medio. Es lo que hay.

lunes, 13 de abril de 2015

Mi primera (y decepcionante) experiencia con Ciudadanos en Lugo

Les advierto antes de nada que hoy el artículo es largo, hasta para ser yo. Luego no digan que no les previne. Tras este aviso de interés público, vamos al tajo:

Cartel de presentación.
El pasado jueves acudí al “Café Ciudadano”, el primer acto abierto al público del que tuve noticia convocado por la agrupación lucense de Ciudadanos. Como el viernes cumplía los 300 artículos en Galicia Digital decidí posponer mi análisis de lo que vi hasta hoy, aprovechando estos días para valorar mis impresiones. Siguen siendo las mismas y no son muy buenas.

El juego de las expectativas, esa trampa mortal en la que ha caído Podemos, es peligrosísimo en cualquier esfera de la vida, pero en política es particularmente letal. Los 15 diputados de Podemos en Andalucía, un resultado que debería ser calificado de excelente partiendo de la nada, son considerados como una debacle frente al que se ve como éxito, los 9 de Ciudadanos, y todo es debido a que unos esperaban mucho más y los otros algo similar o incluso peor. Ya ven cómo están las cosas.

Reconozco que mis expectativas eran altas. El discurso de Albert Rivera en general me gusta, es sólido, parece coherente, suena bien, lo presenta con una facilidad de palabra envidiable y, encima, tiene un punto de respeto hacia los demás partidos al que no estamos acostumbrados y que resulta atractivo. Lógicamente, al ser esa la única cara visible de Ciudadanos te haces a la idea de que los demás serán como clones, y buscas un clavo ardiendo al que agarrarte. Y no.

Para ir entrando en materia comienzo hablándoles de la pésima organización del evento. Llegamos un poco despistados, porque al ser convocado como “Café Ciudadano” no teníamos muy claro de qué iba el asunto. El subtítulo, un “queremos escucharte”, sugería un intercambio de ideas en dos direcciones, lo cual sonaba muy bien. Nuestro despiste no mejoró al llegar porque allí los que también parecían un poco perdidos eran los propios miembros de la organización. Nos dirigimos a algunos conocidos y sabían lo mismo que nosotros: nada.

Preguntamos dónde tendría lugar el acto, y nos dijeron que no sabían porque los sofás donde pensaban sentarse los habían ocupado unas chicas que iban a tomar un café. Llamativo no tener la previsión de ir antes a coger el sitio si no tenías hablado con el local un espacio donde tratar los asuntos a los que se iban o dónde atender a la gente. Tampoco es argumento que fuéramos muchos, porque sacando los que tenían la pegatina del partido (supongo que militantes o miembros de la candidatura) no creo que llegáramos a la decena los interesados “externos”.

Salimos al exterior, a una terraza trasera, y allí hubo una brevísima presentación de dos frases por parte de dos miembros de la ejecutiva de Ciudadanos en Lugo. Nada que objetar, que de discursos castristas estamos todos más que hartos. A partir de ahí, te quedabas un poco despistado nuevamente porque los miembros de Ciudadanos se presentaban entre ellos en “petit comité” (por lo que se ve no se conocían todos).

Entre toda esta confusión surgió un faro de esperanza: Olga Louzao, portavoz de Ciudadanos en Lugo percibió nuestra mirada de confusión y se acercó a hablar con nosotros. Un punto importante para ella. Nos acogió y nos preguntó si éramos afiliados, simpatizantes o simplemente personas que acudíamos por curiosidad. Éramos de este último grupo.

Tras unas amables palabras que disiparon notablemente la pobre sensación sobre la organización del acto, diluyéndola en simpatía y cercanía, entramos en materia. Limpieza, transparencia, cambio, ilusión, trabajo, energía, preparación, sensibilidad… todo palabras hermosas y muy apropiadas que son, a día de hoy, necesarias en la política local… pero… siempre tiene que haber un pero… a mí no me resultan suficientes. Necesito más en unas municipales. Necesito Lugo. Ni una palabra sobre la ciudad o las ideas para mejorarla o cambiarla.

Quienes me conocen saben que soy un pelín osado en estos temas (sobre todo cuando me tocan “mi Lugo”), incluso, diciéndolo suavemente, algo mosca cojonera (en confianza con ustedes, y que no salga de aquí, creo que el término con el que me definí ante los interlocutores de la charla era “tocapelotas”, pero de buen rollo). Pues ejerciendo como tal les indiqué que me parecía que su discurso era bueno pero un poco vacío de contenido para unas locales, más apropiado para unas elecciones generales.

El vecino quiere saber que quien se presenta es honrado, pero casi le importa tanto o más si le van a poner el banco, la farola, o si el autobús va a seguir parando delante de su casa o a trescientos metros.

Para poner un poco a prueba el tema, les pregunté por dos temas concretos: ¿tiene intención Ciudadanos de reformar el PEPRI? ¿Qué opinan sobre la nueva estación intermodal que se proyecta en las Gándaras? La respuesta a ambas preguntas, tras un silencio incómodo, fue: “no nos queremos comprometer con cosas que no sabemos si podemos prometer”, es decir “ni idea”. Preocupante cuando el primero es el tema más importante que hay sobre la mesa para el casco histórico y el segundo uno de los fundamentales para el futuro de la ciudad.

Creo que se me notó el chasco en la cara, porque vino como refuerzo un tal Pedro (no me quedé con el apellido, porque aunque lo dijeran, que creo que no, soy un desastre para estas cosas, lo reconozco) que al rescate volvió a los temas habituales: el despilfarro de Orozco en el MIHL, en la cafetería del Parque, Liñares, Pokemon… en fin, las cosas que cualquier lucense piensa cuando lee esas noticias. Pero no dejaban de ser sitios comunes, la adaptación del discurso de Bárcenas y los ERE de Andalucía traído a Lugo, dentro de la falta de propuestas que observé… y ahí saltó lo que más me preocupó de toda la velada…

Para cubrir sus obvias lagunas en ese sentido añadió algo como “hasta que entremos en el Ayuntamiento y abramos los cajones no sabemos lo que nos vamos a encontrar” (algo que puede parecer razonable) “porque hay cosas que no son públicas, como el convenio de la empresa de recogida de basuras”. Ahí me quedé frío. Sí es público. De hecho yo tengo una copia porque se publicó en el B.O.P. y lo busqué cuando fue la huelga del verano. Se lo dije y me lo discutió “no, no es público”. “Sí, sí lo es”. Y ahí quedó el tema. Hasta yo sé cuándo es buen momento para dejar un tema que no lleva a ningún sitio.

Algunos miembros de Ciudadanos en Lugo.
La foto no es del acto del jueves, sino de la presentación.
Foto: La Voz de Galicia
Por último, que creo que por hoy ya es bastante, hay otro importante asunto que me preocupa. Ya tienen hecho el programa electoral y ya se lo aprobaron “en Barcelona”. Entiendo que un partido reciente revise las cosas que ponen sus “nuevos”, y eso no me parece completamente disparatado pero… si ya tienen el programa electoral ¿qué pintábamos allí? Es decir, si iban a “escucharnos”… ¿qué querían oír? Porque francamente, si el programa está ya cerrado no sé de dónde han sacado las cosas, pero no de escuchar a nadie que yo sepa. Y si ya lo tienen listo, ¿para qué nos dicen que vayamos a hablar? ¿Para hacer terapia?

Creo que a Ciudadanos le ha pasado lo contrario que a Podemos. Mientras los de Pablo Iglesias calcularon mal los tiempos y salieron con adelanto a la palestra, lo que les ha dado tiempo a subir alto pero también a pegársela sin conseguir nada importante, los de Rivera han esperado demasiado y los va a pillar el toro. Que a un mes y medio de las elecciones aún no te conozca ni el gato (aunque sí a tu jefe porque sale en el telediario) es raro como mínimo, y que tu programa electoral se haya hecho entre cuatro amigos tampoco parece lo más razonable en unas municipales.

Están verdes, muy verdes, y eso solo se lo pueden permitir los partidos con una infraestructura sobre la que descansar, que no es el caso. Tendrán un éxito relativo, ya que hay alguna gente que vota en las municipales pensando en clave nacional y llevados por el Telediario, pero menos de la que probablemente se esperan, y no sé si las 2.500 personas que, más o menos, hacen falta para entrar en el ayuntamiento.

Salí decepcionado, la verdad, pero iremos viendo lo que pasa. Probablemente les parezca duro con esta agrupación, y es cierto, lo soy igual que lo he sido con todas las demás, pero es lo que hay a día de hoy: ciudadanos hartos y necesitados de un faro de esperanza. Espero que mejoren algo porque Olga me pareció una mujer preparada, inteligente, atenta y animada a cambiar las cosas, pero no sé yo… creo que se han dormido un poco y me faltó mucho Lugo. Muchísimo.

viernes, 10 de abril de 2015

300 veces gracias

Llevaba poco más de un año con el blog “Historias desde Lugo” cuando Julio Giz me llamó y me preguntó si no me importaba que en Galicia Digital reprodujeran algún artículo de mi bitácora en su prestigiosa página web. Creo que no le dejé ni terminar la frase y ya le estaba diciendo que sí, y no solo eso, sino que para mí era, y sigue siendo, todo un honor.


Hoy, día en que se cumplen 300 de mis artículos recogidos en www.galiciadigital.com, quiero hacer un pequeño homenaje a una empresa que es mucho más que eso, ya que son unos amigos, unos difusores de la cultura y de Galicia, que me hacen el favor de divulgar muchos de mis textos entre personas realmente importantes del mundo de las letras y del pensamiento.

No quiero molestar a nadie, pero me van a permitir que me centre más en Julio y en su hijo Antonio, digno heredero de la saga familiar y cara actual de la empresa. Encima ha heredado un timbre de voz muy parecido al de su padre, y eso no hay dinero que lo pague.

Recuerdo a Julio de toda la vida. Nuestra generación tuvo la suerte de ser de los últimos que jugamos en la calle, y me pasé media niñez en “el cuadrado”, un espacio que está justo debajo de las oficinas de lo que entonces era “VideoLugo”, donde alquilábamos películas, primero en el sistema 2000 y después en VHS. Supongo que para mí es un recuerdo más agradable que para ellos, que nos tenían dando la tabarra debajo de su local tarde sí y tarde también. Julio y Carlos Rodríguez Arias, los que llevaban “VideoLugo”, soportaban con estoicidad los pelotazos ocasionales en sus ventanas y los caprichos de los niños que queríamos alquilar semana tras semana “Mi amigo el fantasma” o “Herbie”. De aquellos años vienen iniciativas como la Semana Internacional de Cine de Autor y diversas iniciativas pioneras que siguen manteniéndose, entre otras cosas, por la constancia y el tesón de personas como Julio Giz.

Pasaron los años y Videolugo dio lugar a Ophiusa y a Interdix Galicia, con una visión de futuro difícilmente entendible de aquella pero que se demostró exacta con los años.

Conocí bastante más a Julio en una campaña electoral, la del 2003, en que trabajamos juntos y lo pasamos muy bien al menos hasta que salieron los resultados, que fueron los que fueron y dejamos de pasarlo tan bien. Y últimamente la jubilación de Julio, que le ha dado algo que no se compra y que es tiempo, nos reúne ocasionalmente en actos de todo tipo y en actividades preferentemente culturales como no puede ser de otra forma en una persona que lleva décadas trabajando en ese ámbito como profesión y como pasión. Julio es un claro ejemplo de que la madurez es un momento que, si se aprovecha como se debe, permite hacer de todo: ejercer de orgulloso abuelo sin abandonar ni una sola de sus actividades intelectuales, que ahora viven un momento de gran esplendor, quizás el mejor, porque no tener que fichar ayuda a relajarse.

Mi relación con Antonio Giz, su hijo, es más breve por razones biológicas, pero no menos cordial. Otro “culo inquieto”, permítanme la expresión, que sigue los pasos de su familia y que ya sea desde su empresa o desde asociaciones de todo tipo (Amigos del Camino de Santiago, Lugo Monumental…) apoya firmemente todas y cada una de las propuestas que se le ponen delante y que puedan promover Lugo y a los lucenses.

Antonio puso a disposición de alguna de esas iniciativas (y lo sé, porque se la propuse yo) algo importantísimo, que casi nunca se valora y que ya mencioné en el caso de Julio: tiempo. Casi el único bien que no se puede comprar, vender ni recuperar. Y lo dedicó de forma altruista a través de su empresa para una actividad modesta pero que entendió que podría funcionar. Es de valorar que alguien ponga tu disposición su medio de vida a cambio de nada, y francamente, todo homenaje en ese sentido es poco.

Con estos mimbres, comprenderán que el cesto está bastante completo. El recibir una llamada de gente a la que aprecias y respetas para pedirte usar tus artículos en una web tan visitada y puntera es un orgullo del que intento no presumir aunque me cuesta, porque es un honor, y hoy utilizo esa manía que tenemos por los números redondos como excusa para agradecer a una empresa, a una familia, su constante trabajo y su amistad. Más no se puede pedir. Muchas gracias a todos.