viernes, 30 de diciembre de 2016

Que en 2017 Lugo sea más Lugo

 
Y en el reloj de antaño como de año en año
Cinco minutos mas para la cuenta atrás.
Hacemos el balance de lo bueno y malo
Cinco minutos antes de la cuenta atrás.

El estribillo de “La Puerta del Sol”, la mítica canción de Mecano que se convirtió en el himno de Fin de Año para una generación, resume a la perfección la costumbre humana de establecer subjetivamente fechas clave para hacer “balance de lo bueno y malo”.

Cierres de ejercicio contables, repaso de los principales sucesos del año, compendios de prensa... todos tendemos a repasar lo ocurrido en los últimos doce meses para ver si hemos mejorado o empeorado, si las cosas han sido lo que pensábamos, y la canción se cumple al dedillo salvo lo de “a ver si en vez de un millón pueden ser dos”, porque ya no estamos en época de bonanza económica como la que se disfrutaba entonces.

Lugo también ha de hacer inventario del 2016, y lamentablemente es un triste recuento. La ciudad no ha superado ni uno solo de los desafíos a los que se enfrentaba en la misma época del año pasado y, salvo pequeñas actuaciones de maquillaje como la de las obras de “consolidación” de San Fernando (que a ver cuánto dura blanco e impoluto, por cierto) el resto de temas siguen estancados. No hace falta que hagamos una enumeración porque todos somos conscientes de los asuntos pendientes, pero baste mencionar que la fábrica de la luz sigue cerrada a cal y canto, al igual que la antigua cárcel, la plaza de abastos sigue sin terminar sus obras, el tráfico continúa siendo un caos, los autobuses no tienen en funcionamiento la nueva organización, el personal del ayuntamiento sigue con su habitual desbarajuste, el MIHL nos da cada día nuevos disgustos, en la práctica la ciudad está todavía sin nuevo Auditorio...

Acabamos antes mirando lo que sí ha cambiado que lo que está pendiente, y francamente es para preocuparse.

¿Qué han hecho nuestros representantes municipales durante los últimos 365 días? Aprobar en pleno una batería de medidas que no dejan de ser de cara a la galería y pelearse entre ellos para mayor gloria del estéril debate “intelectual” (aquí he sido generoso, lo sé). Encima vemos que las peleas no dejan de ser meros ejercicios dialécticos porque a la hora de la verdad cuando se plantea una moción de censura para cambiar las cosas todos se echan a correr, “tonto el último”, para desacreditar tal posibilidad.

Es cierto que Ciudadanos se ha pasado de frenada. Lo de plantear a la buena de Dios una medida tan extrema como esa sin tener ni siquiera hablados los apoyos es un disparate, y aunque tal vez no sea malo abrir ese debate no creo que sea acertado hacerlo así. De todas formas, lo que es seguro es que de hacerlo el momento es éste, porque dentro de pocos meses cruzamos el ecuador del mandato y no es muy lógico hacer una moción de censura para gobernar trece o catorce meses.

Me sorprende un poco más la negativa del PP a plantearse seriamente la posibilidad. La alergia que parecen tener los populares a gobernar la ciudad de Lugo es incomprensible en una agrupación cuyo fin se supone que es precisamente ese, pero ellos sabrán. Llama la atención que carguen contra quien propone la moción de censura en lugar de trasladar la presión a los socios en la sombra de Lara Méndez, con lo que Lugonovo y BNG estarán encantados viendo cómo este asunto se ha convertido en un problema entre Ciudadanos y el PP. Cosas que pasan en Lugo.

2017 no se prevé muy esperanzador que digamos, pero hagamos un ejercicio de optimismo y pensemos que quizá, sólo quizá, Lugo tenga aún una oportunidad de dar por fin un paso adelante, aunque solo sea por cálculos puramente electoralistas y fríos análisis políticos, que dicen que las elecciones se acercan y hay que empezar a hacer algo para sacudirse de encima ese “dolce far niente” que lleva siendo la consigna municipal en los últimos lustros. Necesitamos que Lugo sea más Lugo y menos lugo. Las minúsculas nunca son buenas.

Por lo que nos toca, desearles a todos mis queridos lectores un venturoso 2017 y agradecerles, como siempre, su fidelidad al otro lado de la pantalla. Un abrazo a todos y feliz año nuevo.

jueves, 29 de diciembre de 2016

Techar Quiroga Ballesteros

Lo del reparto de 20 euros por parte de varios grupos municipales era una broma, como muchos pudieron pensar. De todas formas tampoco es que la cosa durase mucho porque no falta quien chafe el asunto a la primera de cambio.

El tema de las inocentadas cae en picado. No tanto por que no haya gente dispuesta a gastar bromas sin mayores consecuencias como por la legión de aguafiestas que en lugar de demostrar que se han dado cuenta de que la noticia es falsa siguiendo el juego y completando la información se dedican a poner “¡es una broma!”, como si hubieran descubierto la pólvora.

Las inocentadas se supone que tienen que ser exageradas, que pongan a prueba la credulidad del destinatario, y que tengan ciertas consecuencias totalmente inocuas. La típica es similar a la de la noticia que puse ayer sobre el reparto de “aguinaldos” por parte de varios grupos políticos del Ayuntamiento. No tiene mayor consecuencia, pero puede funcionar si quienes se percatan de la broma la siguen en lugar de fastidiarla. Ahora parece que es más importante “sacar a relucir” la supuesta inteligencia propia, poniendo sobre la mesa que una broma obvia es tal en lugar de ahondar en el contenido. Pero bueno, es lo que hay.

Esto, que no tiene la más mínima trascendencia, sí es un ejemplo de hasta qué punto estamos perdiendo el sentido del humor.

Lo que no era una inocentada era la portada de La Voz de Galicia de ayer, que sacaba un tema en el que ahonda hoy con la propuesta de cubrir la calle Quiroga Ballesteros una vez peatonalizada. Esta idea no puedo decir que me parezca mala, pero tampoco puedo ponerla demasiado por las nubes porque sería un poco egocéntrico, ya que la propuesta salió de Lugo Monumental en la etapa en que tuve el honor de presidir esa asociación. En cualquier caso intentemos darle un enfoque objetivo al asunto y ver cuales son sus ventajas y sus posibles desventajas.

Reconozco que, empezando por el final, no se me ocurre ningún motivo para no llevar a cabo la instalación de esa cubierta. Los problemas que se nos puedan venir a la mente son todos derivados de la peatonalización, pero una vez se llevase a cabo esa parte, el hecho de poner un tejado a la calle no tiene mayor problemática. Puede, por buscarle tres pies al gato, que a algún vecino le pueda estorbar porque habría que estudiar a qué altura se pone sobre el suelo: si es entre los bajos y los primeros pisos podría quedar demasiado baja, y si es por encima de las viviendas le taparía a los residentes la circulación de aire libre “de verdad” creando un efecto túnel como el de Area Central en Santiago que no parece muy agradable.

En cualquier caso eso son temas técnicos que se podrían solventar con varias ideas, como por ejemplo la de que la cubierta no sea completa y haya un espacio libre generoso para que la sensación sea de “calle” y no de “galería”, pero es cuestión de sentarse a mirarlo con calma.

Las ventajas son evidentes. Lugo es una ciudad normalmente lluviosa aunque estos años parece que la cosa no es para tanto, y permitiría que se pudieran celebrar actividades callejeras durante cualquier día del año. En cuanto al frío es sencillo, con los sistemas existentes hoy día, enfrentarse a eso con estufas exteriores o, sencillamente, abrigándose bien.

Me gustaría, eso sí, retomar otra propuesta que habíamos hecho en su momento: la de poner una cubierta en la plaza de Ángel Fernández Gómez para la realización de actividades. Ahora mismo hay instalada una espantosa y molesta carpa, que además de fea es carísima. Si hubiera una estructura estable se podrían organizar ferias, mercados y actividades cualquier día del año y la feria de asociaciones que se celebró solamente tres días podría quedarse una semana empezando con un pelín de antelación. Ese tipo de cosas.

En fin, que ojalá esto no se quede en uno de esos anuncios-espectáculo que finalmente no cuajan y que Lugo pueda empezar a disfrutar de este tipo de instalaciones. Buena falta hacen.

miércoles, 28 de diciembre de 2016

Aguinaldos con dinero público

Los aguinaldos son una tradición prácticamente residual. Antes eran habituales e incluso se imprimían pequeños recordatorios con textos en plan “el cartero le felicita las fiestas” o cosas así que se repartían a cambio de la voluntad y que servían para que algunos pudieran redondear las cuentas de cara a los gastos extraordinarios de la época.

No es que esté en desacuerdo con la idea de la oposición de Lugo de recuperar esta tradición, pero me sorprende y me parece poco apropiada la forma de hacerlo y el contenido en sí tal y como se enfoca.

Supongo que ya se habrán enterado, pero los grupos de Partido Popular, Ciudadanos y Lugonovo (el resto no, por razones que ignoro) se han puesto de acuerdo para repartir un “aguinaldo” entre los lucenses, dinero que sale de sus gastos de grupo y que no deja de ser parte del presupuesto que pagamos entre todos. Los tres grupos darán 20 euros a cada persona que pase por sus oficinas del Ayuntamiento a lo largo de la mañana de hoy (entre las 10 y las 14 horas), con una cartita felicitando las fiestas.

La idea no suena mal pero la manera de anunciarlo me parece discutible. No se ha enviado nada a la prensa sino que han mandado correos electrónicos y mensajes de texto a sus respectivos afiliados, con lo que la mayoría de la población ni se entera y solo quienes son miembros de dichos partidos reciben la noticia, con lo que en la práctica es un regalo para los “suyos”.

Carta de Ciudadanos anunciando la medida
Por otra parte, que se den esos 20 euros a cada ciudadano, sin distinguir entre rentas, edades o situaciones (al menos tal y como dice el mensaje) hace que no se lo puedan negar a niños y menores, o a personas adineradas. No parece lógico.

Los cruces de acusaciones de los partidos de la oposición en los últimos días respecto a una improbable moción de censura parece que quedan aparcados para ponerse de acuerdo, pero es raro que solo hayan logrado aunar esfuerzos para una medida tan electoralista como ésta, que no solucionará nada a nadie pero que sí costará una fortuna. 

Supongamos por otra parte que una persona va a los tres grupos municipales a pedir 20 euros en cada uno. ¿Son incompatibles? En principio entiendo que no, así que cualquiera puede embolsarse 60 euros en un ratito pasando por las tres oficinas. Eso sí ya es una cifra respetable, pero supongo que el voto no será divisible entre tres así que tampoco es que les valga como partido político para gran cosa.

En fin, que los aguinaldos están muy bien, pero no de esa forma, y menos con dinero público.

martes, 27 de diciembre de 2016

Las (casi inexistentes) actividades navideñas en Lugo

Hay cuestiones contradictorias con el más elemental sentido común. Una de ellas es la famosa pista de hielo que el Ayuntamiento instaló el pasado año y que este año no han puesto por razones desconocidas.

Lara Méndez y Carmen Basadre visitan la pista de hielo
en 2015. Este año no hay nada... Foto: www.lugo.es
Por si no recuerdan de qué va el tema, en las fiestas navideñas de 2015 el Ayuntamiento puso de forma irregular una pista de patinaje de hielo en la plaza “Horta do Seminario” (más conocida como la Plaza Inútil). Ante la denuncia de un grupo de la oposición, concretamente Ciudadanos, la concejala salió a dar sus habituales “explicaciones”, que fueron, resumidamente, que el AVE a Galicia es muy importante. Ya sé que no tiene nada que ver, pero eso se lo explican a la compareciente.

A lo que íbamos. El “éxito rotundo” de la pista de hielo, con gran demanda por parte de la ciudadanía según explicaba el Gobierno Local es lo que me despista. No por el buen funcionamiento en sí, sino por la contradicción intrínseca que supone que si tan bien fue la cosa este año no hayan puesto otra vez la bendita instalación. “Ou arre ou xo”.

La pista de hielo era "del Ayuntamiento" según el Gobierno
La excusa barata de echar la culpa de todo a la oposición en este caso es una chorrada. Nadie, hasta donde yo sé, puso pegas a la existencia de la actividad, sino a que se pusiera a la buena de Dios, sin el oportuno expediente administrativo ni solicitud de licencia que es preceptiva para estas cosas. Imaginen que un niño se descalabra en una instalación del Ayuntamiento de Lugo que no tiene en regla el papeleo. ¿Se imaginan el berenjenal en que nos meten a todos? Porque por mucho que la culpa sea de quien lo hace, los paganos seríamos el conjunto de los ciudadanos, tal y como se demostrará probable y lamentablemente con el Garañón.

Las actividades del Ayuntamiento en Navidad se han reducido a poner un par de carpas con actividades sencillas. Nada que objetar a éstas, pero me resultan escasas. Ni una mala atracción para críos, ni un carrusel...

También es cierto que no todo depende de la administración. En su momento yo mismo intenté traer a la ciudad un precioso carrusel de época que había visto en Sada, y el problema no era económico porque se podía financiar con cierta facilidad, sino de disponibilidad del chisme en cuestión. Pero imaginen qué bonito sería tener algunas atracciones temporales por la ciudad. Y no solo en el centro, sino en todas partes.

Imaginen un Lugo con este tipo de actividades...
Quizá lo suyo sería, con antelación y abierto a todas las empresas que quieran participar, sacar un concurso público para que se puedan poner determinado tipo de atracciones en plazas y rincones de la ciudad. Una pista de hielo en la nueva plaza de la Milagrosa, un carrusel en el centro, una instalación temporal de cualquier tipo en Aceña de Olga... No tendría por qué costar un duro a las arcas municipales y daría mucha vida a la ciudad en una época como la navideña, en que los niños no tienen colegio y, en muchos casos, se aburren como almejas.

La iniciativa privada no necesita necesariamente de subvenciones y ayudas, ni siquiera de que la administración dé el primer paso. Normalmente con no ponerle trabas ya suele aflorar con cierta facilidad, pero en Lugo hay más impedimentos que colaboración y es difícil que ciertas cosas funcionen si no participa la todopoderosa administración pública. Salvo en los centros comerciales, claro, que van por libre por provecho propio y ahí sí que son todo facilidades.

El suelo es público, claro que sí, pero no pasa nada por permitir que algunas personas se ganen el jornal honradamente prestando al mismo tiempo un servicio a la ciudad. Miren en Ribadeo qué bien les va con su pista de hielo, y me apostaría algo a que está instalado con licencia.

lunes, 26 de diciembre de 2016

Malas noticias para la música

El concierto de Noemi
El otro día hablábamos de música para que se animasen a venir a ver a la gran Noemi Mazoy en la Catedral. No nos decepcionó (la verdad es que nunca lo ha hecho) y asombró a quienes era la primera vez que la escuchaban. Es cierto que el entorno ayudaba, y oír esas escalas y esa potencia en un lugar como la Catedral, con su acústica y su solemnidad, impresiona. 

Hoy, sin embargo, el tema no es ese porque lamentablemente el mundo de la música se ha entristecido. 

No recuerdo cuándo fue exactamente, pero hace muchos años vinieron a Lugo los Coros del Ejército Ruso. Fue un espectáculo impresionante, que recuerdo vivamente a pesar de que ha pasado un montón de tiempo y yo era muy joven. Para que se hagan a la idea el concierto fue en el pabellón municipal (el “pabellón viejo”), así que echen cuentas. 

Como bien recordaba el archivo musical humano, Paco Nieto, terminaron aquel concierto cantando el himno gallego, que puso los pelos de punta a todos los que allí estábamos. Incluso conservo por algún lado un alfiler de corbata con el logotipo que usaban de aquella y que era un jinete a caballo con una corchea sobreimpresa. 

Unos 60 componentes de este magnífico coro han muerto en el accidente de un avión ruso que se hundió en Mar Negro, entre ellos Vladislav Golikov, que se hizo particularmente famoso en España por haber cantado una jota aragonesa que fue viral en Internet. Ya saben, esa fama puntual que disfrutó individualmente pero que no tiene comparación con la popularidad internacional de la que gozaron los Coros desde hace años. 

La música rusa no se distingue precisamente por ser alegre. Sentida, solemne, incluso grandiosa como su himno (les recomiendo escuchar la versión del vídeo adjunto en el minuto 57:21), pero no invita a la sonrisa. Hoy menos todavía. 

Verán que hoy será portada de muchos periódicos, sobre todo teniendo en cuenta que ayer, día de Navidad, no había prensa. Pero pasado mañana se habrán olvidado. No son futbolistas, ni estrellas de la televisión. Son militares que asombraban a muchos con sus voces y su música, pero eso vende lo justo. 

Los militares cantantes se dirigían nada menos que a una base siria. Eso da bastante en que pensar, aunque nadie ha hablado por ahora de terrorismo. Conociendo un poco cómo se las gastan en ese país, si la investigación finalmente señala hacia una bomba, me juego algo a que nunca lo reconocerán. Hay cosas que van más allá de la dictadura y que permanecen en el extraño ADN de una cultura que es vecina pero ajena en muchas cosas. 

No es que los coros tuvieran mucha relación con Lugo, más allá de haber venido por aquí a deleitarnos con su música, pero lo he lamentado por ellos y por un mundo que valora más las patadas a un balón que el arte en un escenario. Cuestión de gustos, supongo.

viernes, 23 de diciembre de 2016

Esta tarde el primer regalo de Navidad a los lucenses... y es gratis

Este año el calendario nos ha jugado una mala pasada con las fiestas. Lo de que caigan en sábado y domingo tanto Nochebuena y Navidad como Fin de año y Año Nuevo nos ha privado de los festivos que normalmente acostumbran a estirar un poco los días libres con la complicidad de los fines de semana, siempre que no te toque trabajar incluso en esos días. Siempre se me viene a la cabeza la gente de hostelería, por tradición familiar, y la de los cada vez más numerosos comercios que abren en días que para los demás son de descanso.

Un efecto colateral de esta extraña distribución de días es que no sé a ustedes, pero a mí me ha tardado en llegar la Navidad. Hace un par de días no tenía sensación de “fiesta”, aunque al cumplir años supongo que eso es más habitual. Pero en esto llegó el sorteo de la lotería, que siempre es el pistoletazo de salida de las celebraciones y vino todo de golpe. De hecho tuve un día particularmente cursi, pero es otro tema y vamos a lo importante.

Mañana es Nochebuena y pasado Navidad, pero esta tarde tenemos el primero de los regalos, y como casi todos los grandes presentes, es gratuito: La tradición de nuestra querida Noemi Mazoy, la gran voz de nuestra ciudad, de ofrecer a los lucenses un concierto navideño se repetirá una vez más y tendrá un escenario muy especial: la catedral. Promete ser algo único.

Noemi siempre hizo sus conciertos de Navidad en la iglesia de A Nova, y un par de años los celebró en el Salón Regio del Círculo de las Artes, un marco incomparable. Esta tarde será la primera vez que la escuche cantar en un Patrimonio de la Humanidad, y confío en que muchas personas se acercarán a disfrutar del que seguro que será un espectacular recital.

El concierto será corto, con una duración aproximada de 45 minutos. Empezará a las 20:30 en el Buen Jesús (que es la parte de la Catedral que está entrando por la fachada principal, lo aclaro para que nadie se líe) y consistirá, como es habitual, en villancicos, canciones populares y música apropiada para estas fechas. Incluye mi villancico de cabecera, el siempre emocionante Adeste Fideles, y otros como Noche de Paz o El Tamborilero.

A quienes ya han escuchado a Noemi no tengo que animarles a asistir, porque no conozco a nadie que haya disfrutado de su voz y no esté deseando volver a oírla. Pero a los demás, a las personas a las que nunca les ha coincidido verla les recomiendo muy vivamente que se acerquen a la catedral de Lugo.

Con los conciertos de Noemi me pasa algo desconcertante: me emocionan profundamente. No sé por qué, soy incapaz de explicarlo, pero tiene algo en su forma de cantar, de hacer vivir la música, que me impide dejar los ojos secos.

Esta ocasión es especial. Como ya comentamos en otro artículo Lugo ha recibido del Papa Francisco la renovación de un privilegio, el de la indulgencia plenaria, cotidiana y perpetua, que ya quisiera para sí cualquier templo de la cristiandad (incluido Santiago de Compostela, que no goza de tamaño honor) y como broche de oro del programa de actos diseñados para conmemorar la ocasión se celebra esta tarde el concierto navideño de Noemi.

Ayer jueves fue el acto litúrgico y también hubo otro concierto, un sorprendentemente entretenido recital de Cantigas de Santa María con instrumentos renacentistas que pensé que iba a ser un tostón, para qué les voy a engañar, pero que resultó más que entretenido. Un acierto poner las letras en el programa de mano, no sé de quién fue la idea pero les felicito.

No quiero ser pesado y no me enrollo, pero no lo piensen, vengan. La entrada es libre, la hora las 20:30 y el lugar la Catedral de Lugo. No se arrepentirán. Luego me dicen qué les pareció.

Y por cierto... Feliz Navidad.

jueves, 22 de diciembre de 2016

Campañas caprichosas

Es muy difícil ser concejal, lo reconozco a pesar de que probablemente yo sea una de esas personas que no lo pone fácil con mis habituales críticas, que procuro que sean constructivas pero que a veces entiendo que pueden parecer una cacería subjetiva por mucho que intente lo contrario. Aunque se argumenten las cosas, es cierto que casi cualquier asunto se puede enfocar de dos maneras, una positiva y otra negativa, y lo normal es que según te caiga el gobernante de turno tires para uno u otro lado. El hecho de saberlo nos ayuda también a entender “de dónde vienen los tiros” y aunque las etiquetas son peligrosas, sí nos podemos hacer una composición de lugar, que a veces es injusta pero otras ayuda.

Un ejemplo son las noticias sobre empleo. Cuando gobernaba el PSOE y España corría desbocada hacia el abismo, los sindicatos y simpatizantes del partido de la rosa se empeñaban en guardar silencio o decir lo mínimo, a pesar de la destrucción de puestos de trabajo. El Gobierno por su parte ponía sobre el tapete aquellos supuestos “brotes verdes” y la excusa del “escenario internacional” que sonaba un poco a confabulación judeo-masónica. Desde que los españoles decidieron sustituir a los socialistas por Rajoy, y una vez encaminada la senda de la recuperación, resulta que quienes antes rebuscaban entre los datos para aplaudir la caída libre se afanan ahora en lo contrario, en poner pegas (que todos podemos ver, no somos idiotas) a una tendencia alcista.

Esto pasa en todos los niveles. También en el Ayuntamiento, donde una medida original y diferente se puede entender como tal o como una chorrada de padre y muy señor mío... como lo de hoy.

Resulta que hay una página web que se llama www.las7mejores.com. Es un portal diseñado para aunar en un único lugar todas las fiestas de España, para hacer algún tipo de directorio, y elegir entre todos las fiestas más representativas de nuestro país. Nada que objetar, es un destino como cualquier otro y, al igual que lo que pasa con todas las web de opinión (está usted leyendo una, precisamente), cada cual es libre de decir lo que le venga en gana y esas cosas.

Como la web es de una empresa tienen todo el derecho del mundo a aplicar los criterios que consideren oportunos y el usuario ha de saber que todo lo que esté sujeto a la votación “popular” a través de Internet tiene una credibilidad más que relativa. A menos que te pidan firma digital, dni electrónico o algo por el estilo no deja de ser un sistema pensado más para entretener que para arrojar un resultado fiable. Vamos, que no es el CIS precisamente.

De hecho, si se fijan en las fiestas recogidas en el momento de escribir este artículo, verán que, por el orden actual, son las siguientes: Primer Viernes de Mayo en Jaca, Arde Lucus de Lugo, La Borrasca en Ceclavín, La Caballada de Atienza, las Fiestas Patronales de Graus, la Fiesta Normada de Foz y la Festa da Dorna en Ribeira. Ni la Feria de Abril, los encierros de San Fermín, el Carnaval de Tenerife o las Fallas de Valencia han merecido, según los supuestos internautas, superar a estas siete fiestas de algunas de las cuales, he de decir, no había oído hablar en toda mi vida.

El grupo de Facebook relativo a Lugo más importante, “Eres de Lugo si...”, del que soy miembro orgulloso, también tiene mensajes que insisten reiteradamente para intentar superar a Jaca. Me parece muy bien, son personas que pueden hacer las campañas que les parezca procedente y que dedican su tiempo a esto porque les da la gana, nadie entienda una crítica a esto. Según leemos en ese grupo hay sospechas de tongo. Por lo que comentan los que están con el tema es llamativo que los votos no parecen corresponderse con la realidad, ya que por mucho que los miembros del grupo hagan “batidas de votación”, Jaca siempre sube lo justo para mantener las distancias y seguir en primer puesto. No es que dude de la honradez de la web, pero tampoco tengo criterios para dar por sentado que los de Jaca (ni idea del gentilicio y me da pereza buscarlo, me suena que es “jaqués”) son más disciplinados que nosotros.

Hasta aquí nada que criticar. Repito que la plataforma está creada por una empresa que busca un beneficio, o una obtención de datos, que es totalmente lícita ahí no me meto (además, me da coraje ir al juzgado otra vez).

Pero como es habitual en Lugo cada vez que algo depende de la concejala de Cultura, siempre hay pegas. Tras las pintorescas afirmaciones de Basadre de que ella inventó el Arde Lucus (cuando realmente hubo que convencerla porque lo de una fiesta romana no le sonaba bien, que manda carallo), el asunto es que la campaña que el Ayuntamiento de nuestra ciudad está desarrollando en torno a esto es inconcebible por ser una administración pública.
Siete de las últimas 10 publicaciones del perfil oficial
de las fiestas se dedican a este asunto.

Para empezar por lo dicho: es una web de una empresa de no sé dónde cuya relevancia se está dando por sentada, dándole bombo de forma totalmente arbitraria. No es una guía de reconocido prestigio, y a pesar de mis dudas sobre los criterios de, por ejemplo, la Michelín, si las estrellas se dieran por votación popular (es una idea, oigan) entendería que el Ayuntamiento apoyara a alguna empresa local que tuviera opciones. En plan “todos por Lugo” y esas cosas. Pero no es el caso.

La utilización de recursos públicos (no hablo de dinero, el tiempo también es un recurso finito) para promocionar esta votación se puede entender, según decía al principio del artículo, como una campaña bienintencionada que solo busca un titular de que “el Arde Lucus se alza con el título de mejor fiesta de España”, y salir en el telediario por esto ya que por otras cosas parece que no cuela. La intención parece bastante transparente y no tendría mayor recorrido, si no fuera porque mientras se hace un esfuerzo importante en mover esto en redes sociales por parte del Ayuntamiento de Lugo se ignoran cosas bastante más relevantes para la ciudad. Siete de las diez últimas publicaciones del perfil oficial de Arde Lucus se han dedicado a esto, y no es que publiquen con mucha frecuencia, así que parece que es el único tema importante sobre el que pueden hablar.

¿Cuántos grupos locales tienen el “honor” de ser “movidos en redes” por el Ayuntamiento? Y ya no les hablo de empresas sino de gente que dedica tiempo y esfuerzo a trabajar por la Cultura con mayúsculas y a quienes solo se les ofrece un portazo en las narices. Incluso hablamos de artistas consagrados que tras malísimas experiencias en la casa consistorial buscan prados más verdes fuera de Lugo. Y los encuentran porque tienen calidad que disfrutan fuera de nuestro municipio.

Que el tiempo de quienes gestionan esto se dedique a promocionar una votación privada, de forma caprichosa, mientras asuntos importantes para Lugo no reciben la atención adecuada es de chiste.

Insistentemente...
Aun en el hipotético caso de que el Arde Lucus ganara la votación, ¿qué importancia real tiene eso? ¿Por qué esta web sí y no otras que se dedican a cosas similares? ¿Acaso ahora tenemos que dedicar el tiempo y recursos del Ayuntamiento a poner la ciudad en el primer ranking que veamos por Internet? Porque si es así no les va a llegar el presupuesto anual.

No me entiendan mal. Me parece muy bien que Carmen Basadre salga a decir que se vote a la ciudad en todos los certámenes y porras que en el mundo hay, e incluso aplaudo la insistente pasión con la que muchos ciudadanos se empeñan en poner nuestro Lugo en primer lugar en cualquier sitio. Es más, creo que yo mismo lo he hecho. Pero el tema es que yo no soy el Ayuntamiento de Lugo, ya me gustaría.

La administración no puede funcionar con criterios de este tipo, con campañas caprichosas, y promocionar una iniciativa privada sobre otras porque se lo ha dicho Dios. La improvisación es libre para lo privado, pero no para lo público.

Por cierto,  como yo no soy la administración y puedo hacerlo libremente, les invito a entrar en www.las7mejores.com y votar al Arde Lucus. Lo cortés no quita lo valiente.

miércoles, 21 de diciembre de 2016

¡Lara Méndez resuelve el caso de la fuente!

No entiendo que se molesten en seguir investigando. Lara Méndez ha aclarado el caso sin despeinarse. Ni la mejor detective de Agatha Christie habría sido capaz de resolver el misterio con tal rapidez, contundencia y ausencia de pruebas: la culpa de lo de la fuente es de Rajoy. Puede sonar a chiste, pero lo ha dicho en serio porque según ella “estamos en esta situación por la política de recortes del Partido Popular”. Para mear y no echar gota.

Noticia en El Progreso. Sí, a mí también me costó creerlo.
El domingo La Voz de Galicia recogía un artículo que también publiqué en este blog, en que decía que los únicos culpables de los delitos son los delincuentes. Veo que Lara Méndez no está de acuerdo conmigo, y por lo visto cuando los descerebrados que se subieron a la fuente de la Plaza del Campo decidieron tirarla al suelo estaban presionados por el mismísimo Rajoy y sus políticas.

También ha culpabilizado a Montoro y al PP de la presencia de ratas en Montirón (es en serio, también lo ha dicho), y es una lástima que no se le ocurriera antes, porque ahí tiene un filón para justificar todos los melones que tiene abiertos y que se le puedan ocurrir. Lo de la biblioteca de la que solo hay un esqueleto, el Garañón, el caos de tráfico, el cierre de aparcamientos, Carmen Basadre, las cacas de perro en la Muralla y todas aquellas calamidades que acontecen en Lugo son culpa del PP, que no gobierna en la ciudad desde 1.999 pero para el que siempre se puede encontrar un argumento que lo haga "responsable" para darle leña. Recuerden que de la "herencia recibida" no puede hablar porque es de los suyos pero siempre le quedarán Rajoy o Feijoo. Supongo que también serán culpables de las ciclogénesis explosivas, la niebla de la A8 y, por supuesto, la plaga de avispas velutinas.

Es llamativo ese doble discurso de que hay más inseguridad pero la ciudadanía está más presionada por la famosa “ley mordaza” (no sé ustedes pero yo no me siento menos libre de hablar) y cosas semejantes.

A pesar de que la tentación es grande, no voy a caer en la trampa. Sigo manteniendo que los únicos culpables de la destrucción de la imagen que presidía la fuente es de los memos que llevaron a cabo la “hazaña”. Esto no es matizable ni negociable, porque de lo contrario estaríamos en el camino de justificar cualquier cafrada por la vía de la ausencia de seguridad. No.

Según la alcaldesa se ve que lo importante no es que alguien quiera subirse a derribar una estatua, sino que los recortes presupuestarios le impidan contratar policías para tener un par de ellos en cada esquina. El planteamiento es tan absolutista, tan siniestro, que es para echarse a temblar. ¿Acaso la Arcadia feliz de Méndez es una en que cada ciudadano es vigilado por las fuerzas de seguridad porque no somos lo bastante adultos como para reprimir los impulsos incívicos que podamos tener?

Probablemente se ha pasado de frenada porque le calentaron las orejas las declaraciones hechas el día anterior por Jaime Castiñeira, en que éste acusaba al actual gobierno y su inmediato predecesor de un “buenismo” que nos ha llevado a donde estamos. No estoy de acuerdo con Jaime en echar la culpa al Ayuntamiento, aunque tiene más argumentos que lo de "la culpa es de Rajoy" en este caso. Pero ni siquiera como réplica simplona a esa acusación de Jaime, por cierto, que es algo que se escucha bastante en las calles (la reclamación de seguridad está muy extendida, comprensiblemente), tiene disculpa que la principal autoridad de la ciudad diga cosa semejante.

Sin quitar un ápice de culpa a los tipos que atacaron a nuestro patrimonio, parece bastante obvio que en Lugo sí hay una relajación en el cumplimiento de algunas normas. Digo algunas porque bien que te sancionan si no pagas las tasas de cualquier cosa, pero puedes mear impunemente contra la catedral y colaborar en la destrucción de unos herrajes en su puerta que han sobrevivido 800 años, y no pasa absolutamente nada. Total, ni policía, ni multas ni rabo de gaita.

Decir que los recortes son culpables de una situación que se lleva produciendo en Lugo durante lustros es no solo una tontería, sino además una bajeza, un intento zafio de escurrir el bulto frente a la propia dejación de funciones. Algo similar a la otra lumbrera municipal, la concejala de Cultura (sí, a mí también me parece un sarcasmo), que nos ha responsabilizado a todos, sin cortarse ni un pelo. Pues a mí no me miren, que yo no tengo nada que ver con esto y francamente me ofende que se me comprometa en tal cosa.

La culpa es de los que hicieron esto, y si la alcaldesa quiere buscar otras responsabilidades debería mirar en su propia casa. No hace falta salir de la Muralla para ver deficiencias.

martes, 20 de diciembre de 2016

Poner (solo) la Ronda como zona 30 es una bobada

Paso de peatones en Pontevedra, ciudad con 0 fallecimientos
por atropello desde la imposición de la zona 30 urbana
Foto: Faro de Vigo
Como admirador declarado del alcalde de Pontevedra (en su vertiente de regidor, porque ideológicamente no puedo estar más lejos), lo de la zona 30 urbana me parece una medida excelente. Es difícil acostumbrarse a rodar despacito por las calles, pero una vez que las multas educan convenientemente a los conductores (me incluyo, que al volante todos sacamos aunque sea intermitentemente el Mr. Hyde que llevamos dentro) mejoramos en relajación de la circulación, seguridad e incluso ecología.

La alcaldesa de Lugo anunció el otro día que la Ronda de la Muralla se convertirá en breve en “zona 30”, con lo que pretende mejorar la vida de los ciudadanos. Lamentablemente la medida es una chorrada si se toma de esa forma, suelta, en plan parche cortoplacista, como tantos otros a los que nos tienen acostumbrados y que la oposición, sorprendentemente, pretende apuntarse como logro cuando va a dar unos problemas que ni les cuento, y ninguna ventaja.

Es una tontería pretender que con poner una única calle, por importante que ésta sea, la dinámica de circulación cambie. Lo único que van a conseguir es incrementar la recaudación por multas (¿efecto colateral o idea que mueve realmente el asunto?) y cabrear a todo el mundo, sin lograr nada más.

Tradicional aparcamiento en doble fila en la Calle Orense
Foto: El Progreso
¿Me pueden explicar cómo es posible que en Lugo vaya a ser obligatorio circular a 30 por hora en la Ronda pero se pueda ir a 50 en Recatelo? ¿O en la calle Orense, sorteando alegremente los coches parados en doble fila? ¿De verdad a alguien le parece mínimamente lógico que el principal distribuidor del tráfico en la ciudad se convierta en una carrera de tortugas mientras por sus calles adyacentes se pueda casi duplicar la velocidad? Es como cuando vas, como un idiota, a 30 por hora en el acceso al aeropuerto de Santiago, en una recta de dos carriles en cada sentido tipo autovía, limitada caprichosamente mientras en las corredoiras apenas asfaltadas no te pueden multar por conducir a 90.

Esta medida es un símbolo, pero no de lo que la alcaldesa quiere transmitir sino de todo lo contrario. Se vende como “aumento da seguridade, unha mellora da calidade ambiental e un tráfico rodado máis pacífico”. Vamos, el no va más de la modernidad y la planificación, pero realmente lo que se ve es improvisación, oportunismo y cobardía. Sí, cobardía, porque esta medida solo tiene sentido si se implanta globalmente o al menos por zonas que vayan más allá de una calle.

Lo mismo pasó con el carril bus, otra bobada que se puso a funcionar en la calle Montevideo (bueno, lo de “funcionar” es un decir porque raro es el minuto en que no hay coches “parados un momentito nada más, que vengo ahora, que solo es recoger un paquete y ya lo muevo”) sin que sirviera más que para restar plazas de estacionamiento dentro de murallas y que en los atascos quepan más coches.

Hay medidas que solo funcionan si son globales. El tráfico hay que entenderlo como un todo, y no como una sucesión de absurdas tiritas que se van poniendo para acabar con un caos aún mayor y muchos conductores encabronados.

El orden correcto es: 1 que el transporte público funcione debidamente para dar elección al ciudadano, 2 tomar las medidas oportunas para que desaparezca el tráfico “de paso”, 3 dar alternativas de estacionamiento, 4 peatonalizar, 5 peatonalizar y 6 peatonalizar. Lo de peatonalizar ya lo he mencionado, ¿verdad?

Sin una red de buses digna de tal nombre no hacemos nada. Un ciudadano no puede estar mangado una hora en una parada esperando a que se digne aparecer el autobús para llegar tarde a su trabajo, porque de lo contrario pasa lo que pasa, que saca el coche, y a ver dónde lo mete una vez llega a su zona laboral. Multipliquen por los que somos y verán por qué una ciudad tranquila tiene el tradicional desbarajuste rodado de Lugo.

La rueda de prensa. Foto: www.lugo.gal
Querida Lara, queda muy mona la foto en la ronda y la medida genera titulares, pero ser alcalde es muchísimo más que salir en el periódico y anunciar ocurrencias. Hace falta que las medidas sean valientes, porque aunque al principio arrecian las críticas (pregúntale a Joaquín García Díez por la peatonalización y cómo casi lo apedreaban algunos) pero si sabes lo que haces y estás seguro de que hay que hacer lo que hay que hacer el tiempo acaba dándote la razón.

Olvida la foto para el tweet del minuto y recuerda que ejercer la alcaldía es un acto de amor por la ciudad, independientemente de tu lugar de nacimiento.

lunes, 19 de diciembre de 2016

Vuelve pronto Vicente



Ayer dediqué un poco habitual artículo (es muy raro que escriba un domingo) a intentar explicar por qué considero que ni la policía ni el Ayuntamiento son culpables de la calamidad de la fuente de San Vicente, un monumento al que tengo un cariño especial por su vinculación con el casco histórico, con la asociación Lugo Monumental que tuve el honor de gestionar un par de años y porque estéticamente siempre me ha parecido que la Plaza del Campo es la que más encanto tiene en toda la ciudad, sobre todo una vez destrozada la plaza de O Cantiño con esa reforma que le hicieron.

Hoy me gustaría insistir en esa idea, la de que echar la culpa a Lara Méndez o a la policía de la barbaridad de la noche del viernes es una tontería de marca mayor… Y no creo que nadie piense que soy parcial para exonerar de culpa a nuestra alcaldesa, a la que critico habitualmente, más que nada porque este blog está enfocado a nivel local.

Lo que sí es cierto es que hay que estar pendientes de lo que pasará a partir de ahora. Me preocupa que nuestro San Vicente esté aparcado en un almacén cogiendo polvo como le pasó a la matrona de la fuente de los leones, que solo se restauró de verdad cuando el tema acabó en el juzgado y hubo denuncias por no cuidar del patrimonio común de los lucenses.

Si no me equivoco la fuente de San Vicente no está protegida como Bien de Interés Cultural (BIC para los amigos), y quizá sería momento de empezar a plantearse si es momento de revisar nuestro listado de monumentos para elevar a las autoridades pertinentes la petición de proteger jurídicamente algunos elementos. Esto le va a dar igual al típico bandarra que está haciendo el ganso y que tira la estatua al suelo, pero nos podría ayudar a que la sanción fuera más dura y se lo haga pensar dos veces, o a conseguir fondos inmediatos para la restauración.

Desde su construcción en 1754 gracias al Obispo Izquierdo, la fuente estuvo prestando un honrado servicio público de abastecimiento de aguas durante más de doscientos años, y solo en los últimos años perdió su función principal porque declararon su agua no potable.

Se dice que el San Vicente de nuestra fuente perdió el dedo de su mano, que apuntaba al cielo, en la II República porque les hacía gracia la idea de ver a un santo con el puño en alto, cual comunista declarado. Hace unos diez años algún predecesor de los desgraciados que el pasado fin de semana la destrozaron, le arrancaron la mano completa que imagino que conservarán como trofeo de su estulticia.

En el año 2007 fue completamente restaurada, aunque sufrió otro ataque con el golpe, suponemos accidental, de un camión que rompió el vaso de la fuente, por lo que la dejadez de los responsables la dejó sin agua durante años.

Quizá la fuente de la Plaza del Campo pueda ser un símbolo del Lugo que está en peligro de extinción. Ese Lugo vilipendiado, violentado, apaleado y despreciado que tenemos que recuperar entre todos antes de que lo perdamos para siempre.

Si estuviera en mi mano animaría a todos los comercios, instituciones y demás a coordinar una gran campaña con la peana vacía de la fuente de San Vicente como símbolo. Una fuente hecha de chocolate en una pastelería, algo hecho con plata en una joyería, un bollo de una panadería, fotografías, grabados, dibujos, carboncillos… hay infinidad de posibilidades y todas con una misma leyenda “Vuelve pronto, Vicente”. Un mensaje de unidad en torno a nuestra fuente, para que no esté “archivada” en cualquier almacén durante años como le pasó a los leones de la Plaza de España, y para que empecemos a tener conciencia de que la piedra se puede pegar con química, pero nadie podrá eliminar las cicatrices de la destrucción que quedará ahí para siempre, como símbolo de la vergonzosa inconsciencia o malicia de quienes no saben divertirse sin hacer daño a nuestra historia.

Lugo necesita sacudirse la indiferencia y quién sabe si éste es un buen momento.

domingo, 18 de diciembre de 2016

Los únicos culpables



Lo que le han hecho a la fuente de San Vicente solo puede ser obra de unos descerebrados que decidieron, probablemente alcoholizados, que es divertido destrozar un monumento que da personalidad a un punto estratégico de nuestro casco histórico desde 1.754.

Para muchos de nosotros la Plaza del Campo es uno de los rincones más hermosos que quedan en Lugo, y la escultura goza de una especial popularidad gracias a la fiesta en que San Vicente mana vino en vez de agua. Una vez más todos tenemos que lamentarnos por los actos de unos pocos.

Es fácil dirigir nuestra ira contra las fuerzas del orden con el habitual “¿y dónde estaba la policía?” o incluso razonar que donde ya hubo un atropello mortal sin testigos se deberían haber instalado cámaras. Esa forma de pensar nos llevaría a justificar un Gran Hermano omnipresente que controle nuestras vidas y, lamentablemente es posible que haya que buscar medios de vigilancia que nos protejan colectivamente de tanto salvaje, apenas oculto tras un barniz de civilización porque en vez de palos y piedras lleva un móvil 4G.

Vallas, cámaras, rejas, vigilancia… ¿son la solución? ¿Solo podemos proteger el patrimonio si no le quitamos ojo? ¿La Muralla solo se verá libre de excrementos caninos si tenemos patrullas continuadas? ¿De verdad la única forma de evitar el botellón en el parque es cerrarlo por las noches? ¿O esos no son más que parches que harán que se trasladen los problemas a otros sitios donde se vean menos? Nos quedamos con los síntomas pero no tratamos la enfermedad, y culpamos a la administración porque es más fácil que asumir nuestras carencias como educadores dentro de casa. El Estado ni es ni debe ser todopoderoso.

La culpa del “asesinato” de San Vicente Ferrer no es del Ayuntamiento, ni de la policía. La única culpa de los delitos es de los delincuentes.

Artículo publicado en La Voz de Galicia del 18 de diciembre de 2016

viernes, 16 de diciembre de 2016

Hoy último día de la feria de asociaciones sociales

Les hablaría de lo de la Ronda de la Muralla, pero como eso va para largo y hay algo más urgente que tratar, ya que se acaba hoy, permitan que aplace lo de la “zona 30” hasta el lunes. Hoy les hablaré de un tema social.

Ante el planteamiento de que unos padres usen a su hija enferma para lucrarse la reacción normal es “Ningún padre haría eso”. Pues se ve que sí, al menos eso se deduce de las grabaciones y de las pruebas que se están presentando contra los padres de Nadia y que, a falta de que lo confirme un juzgado, parecen indicar claramente que les han pillado “con el carrito del helao”.

Estas dos personas están haciendo un daño tremendo. No solo a su hija, que también, ni a los cándidos que les entregaron un dinero que pensaban que se destinaría a ayudar a la niña, sino al conjunto de la sociedad, porque están consiguiendo que tantas y tantas asociaciones sin ánimo de lucro que se fundaron para ayudar a quienes necesitan de la colaboración de todos, pierdan una parte de su bien ganado crédito por contagio.

Cuando echas un euro en una hucha de ASPNAIS, Capaces o cualquier otra entidad cuyo noble fin es luchar por los demás tienes que tener la certeza de que ese dinero se utilizará para el objetivo para el que te lo están pidiendo. Las asociaciones que menciono afortunadamente no están en entredicho, y su seriedad y rigor hace que probablemente nunca lo estén, pero no son ajenas a este conflicto porque los padres de Nadia han arrojado dudas sobre toda cuanta organización se nos ponga por delante.

Es más, lo que se está propiciando es dar una excusa a quien la está buscando desesperadamente para no rascarse el bolsillo y hacerse el loco cuando se enfrenta a la posibilidad de donar parte de su dinero a una causa que no le afecta directamente (cuando nos toca, todos somos “sensibles”).

Si les soy sincero soy poco partidario de que el dinero público se desvíe hacia asociaciones, ya que entiendo que éstas son una agrupación de intereses de personas que quieren lograr un fin, pero hay una excepción y son precisamente este tipo de agrupaciones. Creo que es bastante normarl que establezcamos una diferencia entre Fundación Anade, Alusor, la Asociación Contra el Cáncer o COGAMI y la Asociación de Amigos de la Petanca o la Confederación en Defensa de la Pata de Elefante (espero que no exista ninguna para no meterme en un lío tonto).

En Lugo, anualmente, se celebra una feria de artesanía y productos realizados en beneficio de asociaciones de las primeras, de las que es más importante apoyar. El Ayuntamiento les cede la carpa que se monta con absurda frecuencia tras el edificio municipal y se la presta tres días. Termina hoy así que aún están a tiempo de darse un paseo por allí y comprar algún detallito que, además de ser resultón, ayuda a la economía de estas entidades. Dos pájaros de un tiro.

Fundación Anade, Centro Ocupacional de San Vicente de Paul, Asociación Española del síndrome de Wolf-Hirschhorn, Capaces, ALUSOR, Asociación Española Contra el Cáncer, ASPNAIS, AFALU, COGAMI, ASORLU, Asociación Galega de Lupus, ALCER Lugo, Raiolas, ALUME, ASPACE, Somos Unidos por el Cáncer, ADACE Lugo, ALUCEM, Down Lugo y Asociación Bonhomía (Creo que no me olvido a nadie, si es el caso, mis disculpas) son los muchos participantes en estos puestos en que hay de todo así que les animo a que se den una vuelta y a lo mejor encuentren algo que les guste y con lo que puedan hacer una aportación.

Aprovecho la ocasión para sugerir a las autoridades municipales que les ofrezcan a las asociaciones la posibilidad de utilizar esa carpa durante un fin de semana, y no solo de miércoles a viernes, porque es evidente que durante los días laborales hay menos público potencial, y al final se trata de colaborar de la mejor manera posible. No es una crítica, que me parece muy bien que les presten esta instalación aunque sea por la semana, sino una propuesta con la que podría mejorar notablemente el resultado de ventas de las entidades.

jueves, 15 de diciembre de 2016

¿Se quiere convertir la ORA en un ''mal necesario''?


Es ya conocida la noticia de la próxima clausura por parte del Ayuntamiento del aparcamiento de Ánxel Fole, el de la calle del Gran Teatro (lo del “gran” es una reminiscencia del pasado, sí, pero qué quieren que le haga, a lo mejor también me riñe alguien como cuando escribo “Plaza de España”). No han tardado algunos a salir a protestar, cosa que me parece un disparate porque cumplir la ley no es opcional.

De hecho habría que reclamar por lo contrario, si el ayuntamiento hubiera incumplido una norma y hubiera procedido a cerrarlo por razones ilegítimas o si hubiera permitido que se mantenga abierto sin licencia, como ha venido ocurriendo durante nada menos que 15 años. A eso sí habría que echarle un vistazo porque pocos negocios habrá que no reciban sanción alguna trabajando durante tres lustros de forma irregular, al menos según se deduce de las noticias publicadas en los medios de comunicación locales.

Entrada del aparcamiento que se va a cerrar. Foto: Cadena Ser
La cuestión de fondo no es si el Ayuntamiento puede permitir que se mantenga abierto, que la respuesta a esa pregunta la sabemos todos, sino la situación en que queda el casco histórico a partir del 9 de enero, fecha prevista para el cierre.

Se nos hace la puñeta coletivamente porque tras la clausura del aparcamiento gratuito del Hospital San José por las obras de adaptación para centro de ASPNAIS, el subterráneo de la calle del Gran Teatro es el único decente que hay en la ciudad. Los demás estacionamientos, los llamados “públicos” que se construyeron en la época de Vicente Quiroga, son de una cutrez que a duras penas permite salir de tu plaza sin un rayón o una abolladura. Y por si eso fuera poco el gobierno local acaba de autorizar que suban los precios, muy poquito es cierto, solo un 0,2%, pero suben.

Es ilógico que la concesión de esos subterráneos no se haya revisado para actualizar las instalaciones a las necesidades actuales. Si fueran privados era sencillísimo, se les obligaba y punto (de hecho no haría falta porque les iría al bolsillo), pero ya sabemos que lo “público” que tanto les gusta a algunos tiene estas cosillas, que no se adapta a los tiempos. Ampliar las plazas pasando a dos anchas por cada tres estrechas que hay ahora es de sentido común, y a la empresa se le puede compensar con una prórroga en la concesión por las pérdidas que pudiera suponerle, y que estimo que no serán muy cuantiosas porque no creo que llenen demasiados días al año.

Si hay una situación que no está bajo tu control (ni el cierre de San José ni el de la calle del Gran Teatro son cosa de Lara Méndez) lo suyo es planificar alternativas para paliar los efectos negativos, pero francamente, pedir al Ayuntamiento de Lugo un plan B es arriesgado, e incluso osado, teniendo en cuenta que ni siquiera tienen un plan A. Van a salto de mata.

Una posible solución provisional: un aparcamiento
desmontable que se puede retirar una vez superada
la "crisis" de los aparcamientos.
¿Qué soluciones podría haber? Muchas. Desde aparcamientos disuasorios con transporte en lanzaderas gratuitas, hasta ampliación de plazas con sistemas que hoy en día hay funcionando en varios lugares. Incluso hay unas estructuras desmontables que permiten meter un segundo piso a cualquier superficie, con lo que duplicas plazas de aparcamiento sin necesidad de hacer obras, y una vez solucionados los problemas se pueden retirar. Una sencilla búsqueda en Internet te da resultados de empresas que, sin ánimo de publicitar, se dedican a eso y que te ponen el aparcamiento en 48 horas. Miren por ejemplo www.anrotechparking.com o www.invertaresa.com que tienen opciones de este tipo.

Un tercer coche no cabe... Aparcamiento de Santo Domingo
En cualquier caso falta de previsión ante la suspensión de la ORA (cosa que comparto y aplaudo), el desbarajuste del transporte público (esto ya no me gusta, lógicamente) y la pérdida de unas 600 plazas de aparcamiento en pleno centro son elementos que van a dificultar aún más el acceso del público al recinto amurallado, lo que expulsará del centro de Lugo a los potenciales clientes, visitantes y demás, que probablemente optarán por a irse a los centros comerciales, que ahí no hay estas pegas, o a La Coruña a hacer sus compras.

Quizá se trate de eso... o de que la gente se vuelva loca para aparcar y pida de rodillas que vuelva la ORA para lucro de una empresa concesionaria que explote el suelo público... vaya usted a saber. Si se consigue que el ciudadano perciba la ORA como un "mal necesario", no habría protestas ni oposición ante un nuevo concurso para que otra empresa explote los aparcamientos de superficie de la ciudad, y no me refiro precisamente a los aparcamientos al aire libre sino a nuestras calles.

Puede que sea yo muy mal pensado, pero qué quieren que les diga, a veces parece que consuela más creer en la maldad que en la estupidez, porque lo primero al menos tiene una causa y lo segundo es simplemente incompetencia.

miércoles, 14 de diciembre de 2016

A la hora de la verdad estamos solos

Ayer tuve un acto de conciliación judicial con la Editorial MIC. Con lo escrito el pasado día 5 de este mes se dan por satisfechos, y yo también con su aceptación de que lo que dije era cierto, así que ese tema afortunadamente ha “muerto” en la parte que nos concierne a la editorial y a mí.

Pero la cuestión que realmente me duele, como lucense, es la que se refiere al ayuntamiento de mi ciudad. Ahí no ha pasado absolutamente nada, y no creo que sea normal que este asunto me haya causado más problemas a mí que a la concejala que lo generó, firmando un convenio sin ningún tipo de publicidad ni concurrencia competitiva, y que una de dos, o mintió en el pleno cuando afirmó que la revista no la editaba la administración, o mintió en las cartas que se adjuntaban con la presentación de la empresa. Pero mintió, y hay que felicitarla, sí, porque una vez más sale airosa, riéndose en la cara de todos los que hemos tenido el coraje de hablar.

No es la primera vez que pasa algo así. Concretamente estoy pensando en la famosa pista de hielo de la Plaza Inútil, que el año pasado generó una tremenda polémica tras la denuncia de Ciudadanos y que este año no se puso, reconociendo de facto que las cosas no se habían hecho bien. Pero sin más consecuencias. Una vez acallados los ecos periodísticos la “nueva política” también decidió echar tierra sobre el asunto y dejar que se relegase al olvido.

Lara Méndez y Carmen Basadre - Foto de El Progreso
Por una vez les diré que la situación no es culpa exclusiva de la concejala. Basadre hace las cosas a la buena de Dios y nadie le pone coto: ni la alcaldesa, ni la oposición, ni siquiera las empresas perjudicadas por sus adjudicaciones sin concurrencia competitiva o las asociaciones que se supone que los representan. Todos miran para otro lado. Parece que le tengan miedo, no sé.

Se sacan titulares, se habla muy alto, se hacen fotos, denuncias públicas y se dice que son cosas ilegales, irregulares o incluso se menciona a la Fiscalía de cara a la galería en los plenos o artículos de opinión, pero nada más. Todo es una forma de llamar la atención para ganar votos, pero sin dar paso alguno, con lo que la situación se mantiene. ¿En qué han cambiado los procedimientos de la concejala en este mandato? En nada. Y seguirá igual porque le importa un pito lo que le digan y tiene la suficiente cara dura como para presentarse en el Pleno y en vez de dar cuenta de sus obvios errores, sacar pecho.

Si les soy sincero cuando salí del juzgado me planteé cruzar la plaza y meterme en Fiscalía a denunciar al ayuntamiento, pero hasta yo tengo mis límites y a veces me canso. Me siento indefenso en una cruzada que no me reporta otra cosa que disgustos y que mantengo por amor a mi ciudad pero que no puedo sostener yo solo, al menos en lo que a la parte legal se refiere. En la moral afortunadamente mi marido, mi familia y mis amigos me respaldan ampliamente.

De los demás, tampoco es que falten las buenas palabras. Todos me dan la razón y hasta los afectados reconocen que la verdad está de mi parte, pero quienes tienen no solo la capacidad, sino también los recursos materiales y legales, e incluso la obligación moral de dar un paso adelante porque han sido elegidos para representar los intereses de todos los lucenses no lo hacen porque son demasiado cobardes, demasiado torpes, demasiado egoístas o demasiado rencorosos como para hacer su trabajo.

Puedo entender que no se dieran cuenta de algún tema, yo también estuve en el Ayuntamiento y no caí en lo de la revista de las fiestas en su día, pero una vez que lo saben, que tienen delante la verdad, ¿por qué no han hecho nada salvo una comparecencia que solo ha servido para que la concejala se ría de todos? ¿De verdad a Lugo le está sirviendo de algo tener cinco partidos en la (supuesta) oposición?

Me duele particularmente por las agrupaciones que en teoría son más cercanas ideológicamente a mí, el PP y Ciudadanos. De los primeros me esperaba poco porque el uso hace costumbre pero de los segundos me sorprende más por la novedad. No contaba con que dejaran morir el tema, quizá por las incompatibilidades de algún miembro del equipo.

De la política ya te esperas cada vez menos, lo que es muy triste, pero también nos falla la sociedad civil. Las asociaciones están a la busca y captura de subvenciones y poco más. Nadie se enfrenta al poder, y quien tiene la osadía se ve señalado.

Mucha foto de bache, mucha frase grandilocuente... mucho ruido y pocas nueces. A la hora de la verdad, estamos solos.

martes, 13 de diciembre de 2016

Matar moscas a cañonazos

Ser alcalde de tu ciudad tiene que ser increíblemente satisfactorio, al menos si lo haces bien. Creo que no les revelo ningún secreto si les digo que siento una envidia tremenda por quienes han ostentado ese puesto en Lugo, sobre todo si han dejado buen recuerdo como Tomás Notario o Joaquín García Díez. Quizá por eso, por mi pasión municipalista, me enfadan tanto las cosas que veo a diario.

Por ejemplo, hace poco les traía a colación una noticia de la web municipal sobre el pintado de UN paso de peatones. Sí, uno. No es que hayan diseñado un plan de tráfico (bueno, sí lo han hecho pagando una fortuna a una empresa de Cataluña para dejarlo en un cajón, pero nos entendemos) o que se afronte una iniciativa para evitar accidentes, es que han repasado un puñetero paso de cebra. ¡Qué tristeza!

Recientemente volvieron a sacar otra noticia similar. “Instalada UNA banda reductora de velocidad en el barrio de A Residencia, en cumplimiento con los compromisos adquiridos por el Gobierno con el vecindario”. Les faltó poner a la banda municipal y majorettes abriendo el paso de la comitiva.

Por si esta tristeza fuera poco, la oposición, en este caso Lugonovo, salió a protestar porque no le colgaban la medalla de la banda reductora, que habían propuesto ellos “antes”. Como si hubieran descubierto América o inventado la rueda. ¡Qué pena!

No me entiendan mal, no me parece malo que pinten un paso de peatones o que pongan una banda reductora, solo faltaría, pero me suena a poca cosa para que lo consideren un logro político con el que se “cumplen compromisos”. Da idea del nivelón que tenemos y la pobreza de las iniciativas. Esto tenía que ser una cosa tan de trámite que no mereciera nota de prensa, y mucho menos la presencia de las autoridades como si se inaugurase un pantano.

Otras acciones que se metieron en ese gran “plan de salvación” son la reposición de bancos o el podado de árboles. Eso merecería, como mucho, una notita en plan “oiga, cuidado si pasa por Ramón Ferreiro que estamos podando y no sea que se le caiga una rama en la cabeza”, y hasta es exagerado para eso.

Obviamente no faltó el toquecito a la malvada Xunta, que como todos sabemos tiene la culpa de la pertinaz sequía, la caída de la hoja en otoño y todos los demás males que en el mundo son. Si les soy sincero me da la impresión de que realmente lo importante para la web era eso, el poder salir en una foto y meterse con el adversario político, si no, ni se entiende.

Lugo tiene temas más serios. Del Garañón seguimos sin noticias (y tiemblo el día que las tengamos), de la playa fluvial tres cuartos de lo mismo, la antigua cárcel bien, gracias... y así todo.

Sacar una nota de que se coloca un cojín en una calle es matar moscas a cañonazos. Dará votos, sí, pero algún día esas cosas también los quitarán porque la gente se dará cuenta de que si “venden” eso es que no hay otra cosa que decir.

lunes, 12 de diciembre de 2016

Lugo, Ciudad del Sacramento... y ahora más aún

España sigue siendo un país mayoritariamente católico, aunque personalmente estoy convencido de que la "religión" más extendida es la agnóstica o, al menos, eso de “yo creo en Dios pero no en la Iglesia”. Las meteduras de pata de la organización ayudan a que esto vaya a más.

Porcentaje de católicos en España según el CIS.
Un mercado muy apetitoso...
Como decíamos, la católica sigue siendo la religión más extendida de nuestro país por mucho que vaya perdiendo importancia. El CIS dice que entre un 70 y un 75% de los españoles se declara católico, y aunque luego solo un 14% de ese total van a misa semanalmente, eso no quiere decir que solo esas personas se puedan considerar “católicos de verdad”. Siendo muy conservadores y tomando la cifra menor como tales, esta estadística arroja que más de 4,5 millones de españoles son católicos “pata negra”. Supongo que podemos asumir sin riesgo que bastantes más sienten cercanía por esa religión.

Pues si tenemos en cuenta todo eso, y viendo este asunto desde el punto de vista puramente económico, social, cultural o como le quieran llamar ¿alguien sería capaz de explicarme por qué ni Lugo, ni nuestro Ayuntamiento, ni la mayor parte de nuestros convecinos se ha dado por enterado de la importantísima renovación del privilegio de la indulgencia plenaria perpetua de la Catedral de Lugo?

“¿Y eso qué es?” Se preguntará alguno. El “Código de derecho canónico” y el “Catecismo de la Iglesia católica”, definen la indulgencia como la “remisión ante Dios de la pena temporal por los pecados, ya perdonados, en cuanto a la culpa, que un fiel dispuesto y cumpliendo determinadas condiciones consigue por mediación de la Iglesia, la cual, como administradora de la redención, distribuye y aplica con autoridad el tesoro de las satisfacciones de Cristo y de los santos”. ¿Se han enterado? Yo tampoco.

Lo que suele deducir todo el mundo es lo de que si vas andando a Santiago te perdonan tus pecados. Esto, como casi todas las cuestiones dadas por sentadas de forma popular, es una barbaridad, aunque basada “en hechos reales”, como las películas que deforman la realidad para que sea más espectacular o más fácil de entender para el público.

Para empezar no hay que ir andando, puedes ir cómodamente sentado en tu coche o sufriendo un poco más en el Freire. Tampoco es necesario abrazar al apóstol, darse cabezazos contra el “santo dos croques” (que, por cierto, es el Maestro Mateo, autor de Pórtico de la Gloria) ni ninguna de las demás tonterías que el turismo ha convertido en “tradiciones”. Las obligaciones concretas son visitar la Catedral de Santiago, confesarse y comulgar en los quince días anteriores o posteriores a la visita (no hace falta que sea allí) y… que sea Año Jacobeo. Y aquí es donde la importancia de Lugo cobra vida y justifica todo lo que les estoy contando.

Custodia del Santísimo en Lugo
Foto de la web del Obispado de Lugo
Conseguir la indulgencia plenaria en la Catedral de Lugo no está restringido a un capricho del calendario: se puede lograr todos los días de cualquier año, y además 24 horas al día porque Lugo tiene el peculiar privilegio de tener expuesto al Santísimo día y noche.

Esto quiere decir que si esta indulgencia plenaria, que no tiene ninguna otra ciudad que yo conozca, se hubiera otorgado a la catedral de Santiago o a la de León, todos ustedes lo conocerían porque sus Ayuntamientos se habrían movilizado dejando a un lado las cuestiones ideológicas y se explotaría ese hecho como un símbolo de triunfo de la ciudad. Porque lo es.

Pero en Lugo ya sabemos que se concibe que el progresismo ha de desentenderse de hechos históricos relevantes si no son acordes al único catecismo válido, el del Partido. Eso unido a la falta de pericia en su campo de la concejala responsable (es un decir) de Cultura y Turismo, ha condenado al olvido este asunto.

Escudo de Galicia
con Lugo en el centro
Es una pena. Lugo es la Ciudad del Sacramento, hecho que está reflejado en el escudo de Galicia (el cáliz central con la hostia son los de Lugo, sí), y desde hace un mes se ha renovado el privilegio por el que superamos de largo a Santiago de Compostela en el tema de las indulgencias. Es lógico teniendo en cuenta que ellos tienen al “siervo” y nosotros al “señor”. Pero eso no “mola” y se pasa de puntillas.

Si tuviéramos un programa cultural que hiciera palidecer la importancia de este asunto hasta lo podría entender un poco, pero no es el caso. La Voz de Galicia dedicaba su portada de ayer a hacer una acertada crítica del páramo que era Lugo durante el puente de diciembre, en que otras ciudades e incluso municipios mucho menores en tamaño y presupuesto, daban opciones interesantes para atraer público. Aquí nada, como si nos gastaran la ciudad.

El Gobierno Local, y concretamente la concejala Carmen Basadre, están más pendientes de presentar chorradas para hacerse fotos y salir en el periódico luciendo el palmito que de ser prácticos y plantear una estrategia de ciudad de cara al turismo, quizá porque no son capaces. Cortoplacismo, colegueo, ideología, caprichos y estulticia son las marcas de la casa. Y la oposición… de vinos, supongo, de otra forma no se entiende.